Elecciones con trampa, fraude y corrupción

Tucumán, Formosa y Fuerte Apache

En Tucumán, el mamarracho electoral pactado por el oficialismo K de Alperovich, con el Acuerdo para el Bicentenario (alianza de la UCR, peronistas disidentes, macristas, etc.), amontonando decenas de boletas atrás de cada candidato a gobernador, culminó con un escandaloso fraude en el que no faltó nada: quema y robo de urnas, otras que llegaron con votos puestos, balaceras, voto cadena, compra del voto dando desde bolsones hasta heladeras, y desde $100 a $500. En la noche del lunes, una multitud se concentró en la plaza central de San Miguel y otras localidades, denunciando: “Se robaron todo, y ahora nos quieren robar el voto”. La movilización fue brutalmente reprimida, con heridos y presos, y lucha en las calles.

La Argentina kirchnerista es así. El gobernador K Alperovich, hombre del cada vez más poderoso banco Credicoop, aliado a la mafia de la droga y la trata, compra votos por comida y obliga al voto-cadena a los que malviven con los planes sociales. Es así en Jujuy, donde asesinan a un joven militante radical, y Cristina Kirchner, que se borró cuando la masacre de Cromañón y la de Once, y se volvió a borrar ante las inundaciones en Buenos Aires igual que el gobernador Scioli, usó la cadena nacional para encubrir el asesinato.

Dijo Carlos Tévez sobre Formosa: “Salimos del aeropuerto camino al hotel. La gente se cagaba de hambre. Y el hotel era Las Vegas, con casino y todo. Los chicos no se merecen estas cosas”. Agregó: “Sería como poner un hotel 5 estrellas en Fuerte Apache”, la villa donde vivió.

Cuentas que no cierran

En el primer semestre del año, el gobierno tuvo un balance negativo entre los ingresos y gastos (sin contar pagos y toma de deuda) de $46.594 millones, es el llamado déficit fiscal primario (en el 2014 tuvo un saldo favorable de $2.202 millones). Y tuvo un déficit financiero (pago y toma de deudas) de $107.000 millones (en el 2014 el déficit fue de 37.291). A fin de año, se estima que el déficit financiero llegaría a $300.000 millones, el 7% de lo que produce el país. Para financiar su campaña electoral, el gobierno agravó el saqueo de las reservas del Banco Central y los fondos de la Anses. Manoteó85.000 millones de dólares del Central, depositando en su lugar papeles que nunca se van a pagar. Y para mentir sobre las reservas, tomó préstamos a un año en yuanes chinos, que vencen a partir del cambio de gobierno. Como mucho, las reservas reales llegarían a los 11.500 millones de dólares, y está pendiente el pago de varios miles de millones de deuda y de importaciones.

Desesperado por dólares y por pesos, el gobierno mantiene a rajatabla los regresivos impuestos al salario y el IVA y los impuestos que castigan a la pequeña y mediana producción agraria. Desvió los fondos para obras hídricas a las represas de Santa Cruz, un enorme negociado con las tierras que las rodean compradas por testaferros K, parando las obras para prevenir las inundaciones en Buenos Aires. Y como es un gobierno proterrateniente, en lugar de ponerle un impuesto a los latifundistas que se beneficiarán con esas obras, se las cobra a todo el pueblo con el impuesto a los combustibles (5% a las naftas y el 9% al gas). Con lo que esos latifundistas seguirán haciendo su negocio centenario: compran campos a precio vil con las inundaciones, y los venden a precio de oro cuando retroceden las aguas y esas tierras vuelven a ser productivas.

Ya lo denunció el Che

El gobierno K paga el fracaso de su política de asociación estratégica con China. Ocultó que esa política profundizaba la dependencia que oprime a la Argentina. La devaluación del yuan y la nueva caída de las bolsas chinas son consecuencia del freno de su economía. Y como China era la locomotora de la economía mundial, su temblor financiero y la situación de su economía provocaron una oleada de caídas en las bolsas en todo el mundo. Esto golpea a América Latina, por ser proveedora de materias primas a China, provocando la baja del valor de nuestras exportaciones en el mercado mundial.

Los temblores de China golpearon duro a un Brasil en crisis, que lleva 6 meses de caída de la producción, lo que rebota en la Argentina: Brasil y China son nuestros principales mercados. La devaluación del yuan agrava el déficit del comercio con China. Este sistema perverso, que nos fuerza a exportar materias primas baratas e importar productos elaborados y caros, ya fue denunciado por el Che Guevara como uno de los instrumentos de la dependencia de nuestras naciones. No dicen nada de esto Cristina y Scioli, ni Macri. Ellos dicen que van a seguir los acuerdos con China, que golpean a la economía nacional. No hay imperialismo bueno, eso solo lo piensan los que tienen alma de sometidos.

Otro “corralito”

Aunque su plan para las elecciones de octubre simulando que la Argentina está bien se descose, el kirchnerismo sigue adelante. El país está mal en lo social y en la economía. Y en la política, si les fuera bien, no necesitarían las tramoyas y el fraude de Tucumán (y el denunciado fraude en Buenos Aires y otras provincias).

Cristina K le marcó la cancha a Scioli. Le recordó su estrecha relación con Macri, cuando el grupo Macri fue “salvado” por la Corte Suprema menemista en un juicio por contrabando de su empresa Sevel. Le advirtió que “seguirán estas políticas”, y apartarse de ellas sería “traición al pueblo”. Además, mandó una ley al Congreso, para que ni Scioli ni Macri (si llegan a la presidencia) puedan hacer lo que estuvo haciendo Cristina, vender acciones de las empresas privadas en poder de la Anses. Para venderlas (como tienen programado Scioli y Macri), van a tener que acordar con Cristina para que los legisladores K apoyen esas ventas.

Como dicen los tucumanos, “Scioli vino a bancar la mugre”. Además, su declaración jurada de bienes es un chiste malo. A su mansión (con un terreno de 15.000 metros), le da un valor de $2.188.000. Al metro cuadrado de tierra le da un valor de $3, en la zona más cara de Tigre, cuando en un barrio obrero está a $720. La propiedad vale más de 10 millones de dólares. El viaje a Roma de Scioli, abandonando a los inundados, podría explicarse por la urgencia de pasar a testaferros los bienes del gobernador en Italia, para que no aparezcan en la ridícula declaración jurada que ocultó durante 10 años.

Cristina K va encerrando a Scioli en un corralito. En contra, tiene la presión de algunos gobernadores peronistas, que en varios casos expresan la presión de los monopolios y grandes terratenientes de sus provincias.

Paro nacional y fortalecer PTP y Frente Popular

Con la emisión de pesos desenfrenada y el vaciamiento del Banco Central, la inflación se agrava recortando los salarios, las jubilaciones y los planes sociales. El agravamiento de la situación económica y social, exigen retomar el plan de lucha con un paro nacional activo de 36 horas, multisectorial, uniendo al movimiento obrero con los pequeños y medianos productores y chacareros, entre los que brotan las luchas nacionalmente; luchas que es necesario encauzar en una confluencia combativa. La jornada de lucha de la CCC de Buenos Aires y Capital Federal va en esa dirección.

Es clave romper la intentona del gobierno K por romper ATE –usando el Estado y la lista Verde y Blanca-, con una masiva votación a la lista Verde Anusate, en la que participa, con sus posiciones, la Corriente René Salamanca, integrante de la CCC. Es fundamental para impedir la división y fortalecer un ATE y una CTA combativos, que fogoneen el plan de lucha hacia un nuevo paro nacional, y para las luchas con las que habrá que enfrentar los planes de ajuste que se preparan para después de las elecciones.

Las tramoyas y el fraude en Tucumán muestran lo desigual de la batalla electoral. Y muestra la necesidad y la posibilidad de fortalecer el PTP, con la personería en la Capital Federal y todas las provincias, y echar raíces en las concentraciones obreras, campesinas y populares. Fortalecer el PTP y fortalecer el Frente Popular abriéndole las puertas a miles de trabajadores, campesinos, mujeres y jóvenes que buscan un camino para ganar una década en la que el pueblo conquiste el gobierno y el poder para acabar con la dependencia y el latifundio. Que paguen el ajuste los que juntaron la plata con pala en la década K, que vayan presos y se expropie a los corruptos. Para acabar con las mafias de narcos y trata. Y para tener trabajo, techo y tierra, y una segunda y definitiva independencia.-