jueves 28 de marzo de 2024 - Edición Nº3659

El Fierro | 9 sep 2015

Opinión - La hora política

El camino de la rebelión tucumana

Trampas, fraude, corrupción y compra de votos para garantizar la continuidad del ajuste y la entrega. La semana política por Ricardo Fierro.


Se plantaron

La rebelión del pueblo tucumano contra la trampa, el fraude, la corrupción y la compra de votos, mediante una asociación ilícita compartida por los aparatos electorales estatales provincial y nacional, abrió un debate sobre el sistema político reconstituido por el kirchnerismo después del terremoto político del 2001.

Las elecciones en Salta, Santa Fe, en La Rioja y otras provincias, el carácter proscriptivo de las PASO (incluyendo el fraude en la provincia de Buenos Aires), fueron campanazos de alerta. Pero fue la rebelión tucumana la que desnudó la podredumbre del sistema: “Se robaron todo, ahora nos quieren robar el voto”, “Scioli vino a bancar la mugre” y, “¡Qué se vayan todos”!, fueron consignas que desde la Plaza Independencia conmovieron a todo el país. Si algo le faltaba para completarlo, lo acaba de aportar Capitanich y el kirchnerismo chaqueño, con el uso directo de la droga como moneda para la compra de votos; no porque no se usara antes, sino porque la alerta tucumana creó condiciones para que lo peor de la mugre salga a la luz.

La podredumbre del sistema político

El gobierno kirchnerista ha sido el autor material, el principal beneficiario y el garante de este sistema electoral, pero tuvo una amplia colaboración. El pánico que generó, en el bloque dominante, la crisis política (de hegemonía) abierta en el 2001, llevó a los grupos de poder a aplaudir lo que el jefe de Clarín, Magnetto, calificó de “un sistema inteligente”, de los Kirchner, para reconstruir el aparato político del sistema.

Con la salida de la crisis económica a partir del 2002, los cambios tecnológicos en la producción y la superexplotación impuesta por las leyes de precarización laboral llevaron a nuevas camadas de jóvenes trabajadores a la producción. Sobre la base de viejos y nuevos punteros, desde el Estado, el kirchnerismo fue construyendo un gigantesco aparato clientelar cautivo. La cooptación de dirigentes del movimiento de desocupados mediante la corrupción, fue la base de ese aparato clientelar. Solo con la lucha y la politización del movimiento de desocupados se pudo poner límites, lograr conquistas, y sostener una parte de ese movimiento histórico, como los desocupados de la CCC y los jubilados del MIJP, entre otros.

El kirchnerismo fue reemplazando el esquema bipartidista, por “frentes” con retazos de los viejos partidos. Ese proceso coronó con la instalación de las PASO, en la que el Estado se adueñó de las internas de las organizaciones políticas, imponiendo cláusulas proscriptivas para impedir el surgimiento de nuevas organizaciones populares. Y los monopolios multimedios chantajean al pueblo con el “voto útil” a los candidatos publicitados del sistema.

Donde hizo falta, las provincias aplicaron leyes de lemas o el sistema de “acoples” como en Tucumán. Colgarse del aparato del poder se convirtió en el mecanismo para lograr cargos y puestos, y la compra-venta de votos se convirtió en el mecanismo “natural” de la política.

A esto se suma un aparato con lo fundamental de los 500.000 fiscales y autoridades de mesa, que garantizan el robo de boletas, y el fraude en el escrutinio en perjuicio de las fuerzas que no tienen fiscales en cada mesa.

Y el “broche de oro” es el Correo Central, que maneja La Cámpora, que puede demorar varias horas la entrega de boletas, como hizo para garantizar el triunfo de Aníbal Fernández en Buenos Aires. O quemar, robar y “embarazar” urnas (colocando votos antes del inicio de la jornada electoral) y cambiar los números en los telegramas, como ocurrió en Tucumán. Además, el mismo aparato maneja la designación de autoridades de mesa, y su reemplazo por un puntero ahí donde no se presente. También, tiene el manejo de la impresión de DNI, para que voten los muertos y los ausentes.

Para más ajuste y más entrega

El escándalo en la elección tucumana es un signo de debilidad del gobierno, como también lo es la derrota de su candidata en Bariloche, la actual intendenta. La situación económica y financiera, que Cristina y Kicillof venían estirando para llegar a las elecciones de octubre sin sobresaltos (y noviembre si hay segunda vuelta), se les complica. Ante la negativa china a ampliar el préstamo de yuanes, ahora buscan conseguir rublos en Rusia. Pero el frenazo de la economía china empujó a Brasil a la crisis y la Argentina se ve perjudicada tanto por la situación de China como por la de Brasil. Claro está que la presidenta sigue sosteniendo que la industria nacional está en su mejor momento histórico (discurso de dos horas por cadena nacional), mientras que la Unión Industrial Argentina (UIA) en su acto oficial sostuvo que hay un retroceso a 40 años atrás.

La situación es tal que ya los candidatos no disimulan los ajustes que preparan, unido a una devaluación y un shock de endeudamiento externo. Scioli ya negocia con los fondos buitres, y Macri con el FMI. L UIA y otros centros empresariales presionan para un “pacto social” que ponga un techo a los aumentos salariales en las paritarias durante los primeros dos años del próximo gobierno. Como se ve, frente a las consecuencias de la política K de ahondar la dependencia y el latifundio, buscan salidas descargando un nuevo ajuste, y más dependencia, sobre los trabajadores y el pueblo.

Gran triunfo en ATE

Le fracasó al kirchnerismo el intento de copar o dividir el ATE nacional, para subordinarlo a la CTA de Yasky. El triunfo de la lista Verde, en la que participa la Corriente René Salamanca, es un hecho de enorme importancia para la lucha de los estatales, y para un nuevo paro nacional activo, de 36 horas, multisectorial, que contribuya a unificar los combates de los trabajadores, los campesinos y el pueblo, que se extiende por el país.

Copar o dividir a las organizaciones sindicales y sociales va unido a las trampas, el fraude, la violencia, el clientelismo y demás podredumbre del sistema político. El objetivo es hacerle pagar al pueblo el ajuste y la entrega.

Avanza hacia definiciones el juicio por la masacre de Once, en donde el kirchnerismo trata de garantizar la impunidad de los funcionarios y empresarios responsables políticos de esa masacre. ¡Qué paguen con la cárcel y se expropien sus bienes producto de la corrupción y de la sangre de las víctimas de Once!

Caminar con las dos piernas

La rebelión del pueblo tucumano demuestra que también en la lucha electoral hay que caminar con las dos piernas: la de la lucha en las calles y la de las urnas. A su vez, la derrota del kirchnerismo en las elecciones de ATE, muestra que la lucha sindical, además de fortalecer la lucha contra la política de ajuste K, también fortalece la construcción del Frente Popular.

El camino abierto por el pueblo tucumano muestra que hay condiciones para avanzar con la personería del PTP en todas las provincias y la Capital Federal, y que es una necesidad de los trabajadores, los campesinos y el pueblo, las mujeres y los jóvenes, fortalecer el Frente Popular. El resultado electoral en Rincón de los Sauces, con el 11,1% de los votos, es un nuevo estímulo para avanzar. Profundizar el camino abierto en cada una de las elecciones pendientes, denunciando ante las masas todos los mecanismos de la trampa, el fraude, la corrupción y la compra de votos con que el kirchnerismo intenta perpetuarse, y los de quienes se ofrecen como su relevo en el ajuste y la entrega.

Hay grandes tareas por delante: fogonear el paro nacional, pelear el voto en el Chaco denunciando las maniobras que preparan, al igual que en varias elecciones municipales, rodear de solidaridad a las víctimas de Once, y trabajar por un exitoso Encuentro Nacional de Mujeres en Mar del Plata.-

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