Moyano cedió: “Pido disculpas”, “les abrimos los brazos” y “vengan que los necesitamos”

CAPITAL FEDERAL, Julio 23 (ANDigital) Mientras los denominados “gordos” debatían romper o no con la CGT, en un acto en la sede de la central obrera, Hugo Moyano, esbozó una inédita autocrítica y les mandó un mensaje claro a través de los medios: “Si algún error hemos cometido, les pido disculpas”. Minutos después, el sector disidente aceptó la tregua, en boca de Andrés Rodríguez (UPCN): “No hay fractura”.

Ante la fuerte avanzada contra su conducción, el secretario general de la CGT organizó un acto en la mítica sede de la calle Azopardo en la que cedió claramente al sector de los gordos de la central obrera, que se mostraron hartos de “su metodología personalista de conducción”.

El Secretario General de UPCN explicó la tregua en que si Moyano “ha reflexionado y ha pedido disculpas”, es “una mejoría muy importante para la convivencia”.

Rodríguez confirmó que se resolvió no romper con la CGT, pero advirtió que “nosotros queremos un cambio de la metodología de conducción”, motivo por el que hay que ver “cómo se dan las cosas” de ahora en más.

En rigor: Moyano escuchó el mensaje de sus opositores y cedió; sus disidentes respondieron también, cediendo en no romper y lacerarle poder como conductor. La de este jueves fue la instancia de los mimos, ahora viene la de los resultados, de cómo se den las cosas y actúe el líder camionero.

El mensaje conciliador

“Esta CGT tiene abiertas las puertas a todos los hombres y mujeres de buena voluntad. Acá no hay impedimentos para venir a plantear lo que sea necesario. Tenemos nuestras personalidades, nuestras formas de ser, pero somos abiertos. Tenemos pocas virtudes pero una es la que reconocen los trabajadores: nunca vamos a hacer nada en contra de los trabajadores", arrancó su discurso Moyano, ante los jefes sindicales que aún le responden.

Fue en la puerta del edificio de Azopardo 802, desde donde Moyano envió un mensaje televisado a sus adversarios, reunidos en la sede del Sindicato de la Sanidad, donde debatían romper de una vez por todas, o no, con él.

“Podemos estar todos los dirigentes, o pocos dirigentes, pero la CGT son los trabajadores. Les abrimos los brazos a todos los compañeros, vengan que los necesitamos. Les digo que si algún error hemos cometido en el tratamiento, les pido disculpas, pero que vengan a la CGT”, pidió Moyano. Esta vez, fue escuchado. (ANDigital)