jueves 28 de marzo de 2024 - Edición Nº3659

Interés general | 4 mar 2014

Crónica del desastre

Coronel Pringles, anegada por un temporal de nieve

Se trata del temporal de nieve más grande que se conoce en los anales de este partido bonaerense. El suceso pasará a formar parte de las catástrofes climáticas de la historia local. Más de medio metro de nieve aisló a la ciudad.


CORONEL PRINGLES-BUENOS AIRES, Julio 24 (Por Julio Torreguitart, especial para ANDigital) Calles colmadas por la feroz nevada que se precipitó con inusual intensidad, fue impidiendo con el correr de las horas la normal circulación de vehículos en todas las arterias de la ciudad de Coronel Pringles, donde se suscitó uno de los temporales de nieve más grandes de la historia de este distrito del sudoeste bonaerense. Se cortó la luz, el agua, algunos teléfonos y se perdió la señal de celulares.

Muchas familias tuvieron que pasar la noche en lugares improvisados por la comuna y cientos de camiones y automovilistas quedaron varados en la ruta provincial 51.

La nieve, que nuevamente comenzó a caer cerca de las 4 de la madrugada de este jueves, llegó con vientos huracanados de más de 80 kilómetros en la hora, lo que hicieron que el meteoro pegara con fuerza y acumulara una gruesa capa de nieve en pocas horas.

En las rutas, por momentos, la visibilidad fue nula debido a la intensidad del viento y los gruesos copos, y ya cerca de las 9 horas en zonas rurales había más de 40 centímetros de nieve que dejaban “literalmente” colgados a la mayoría de los automóviles que circulaban desde Buenos Aires a Bahía Blanca o viceversa.


Desde temprano bomberos sin descanso

Muy temprano (a las 8.15 de este jueves) comenzó la dura labor de los bomberos voluntarios locales, todo el cuerpo se movilizó con todos sus hombres y vehículos –algunos de ellos no sirvieron para atravesar la nieve–, para auxiliar a los automovilistas encallados en rutas y caminos vecinales de campo.

A medida que transcurrían las horas, la situación se ponía cada vez más crítica; personas encerradas en automóviles esperaban el rescate, una larga fila de camiones de varios kilómetros quedaban varados en busca de alguna estación de servicio donde buscar alimento y combustibles para abastecerse, familias que ingresaban a Pringles a pasar la noche ante la imposibilidad de continuar su viaje, un caos para el cual la ciudad no está preparada.


Tras la nevada los daños

Como si fuera poco la nieve, el temporal dejó sus desastres ante su paso. El techo del hipermercado bahiense “Cooperativa Obrera” cedió ante el importante peso que sumó la masa blanca a sus estructuras y se cayó sobre las góndolas cundiendo en pánico a sus empleados, quienes no sufrieron daños personales.

El derrumbe ocurrió antes de la apertura del comercio, ese fue un factor que permitió que no se hayan producido heridos, sólo pérdidas materiales.

Luis Arriola, referente de Casa Central del ente cooperativo, declaró que la reparación de esta sucursal en Pringles llevará al menos dos meses para volver a funcionar normalmente.

También el techo de otro supermercado, “La Sirena”, corrió riesgo de caerse y el de la guardia del sanatorio sufrió algunos daños.

El meteoro a su paso fue dejando sus daños colaterales, también la ciudad se quedó sin luz merced a la caída de cables y la Cooperativa Eléctrica recomendaba no malgastar el agua porque podría faltar ante el corte de energía.

Los celulares perdían su señal, agregando a la situación otro problema más: la incomunicación.


Familias varadas en medio de la nieve

Las salidas de bomberos, si bien eran realizadas con pericias, chocaban contra la fuerza de la naturaleza, algunas camionetas eran vencidas por la espesa nieve dejándolas encajadas; sólo los camiones de gran porte llegaban a algunos lugares a auxiliar víctimas del temporal.

Ya entrado el día, las familias que deambulaban buscando hoteles (estaban todos colmados), superaban la capacidad de albergue local; la mayoría terminaba en el cuartel de bomberos, donde fueron atendidos de manera excelente.

Todos los entrevistados por ANDigital coincidieron y quisieron hacer oír su voz respecto a los servidores públicos y su encomiable tarea: “Si no fuera por ellos no sé dónde estaría”, dijeron varios consultados.

Un micro de la firma Plusmar quedó atorado en la nieve a la altura de “El Despeñadero”, a 35 kilómetros de Pringles, según informaciones de quienes recibieron un panorama del lugar desde estancias cercanas; el colectivo cargado de pasajeros vio interrumpido su camino por varios camiones que se cruzaron en la ruta 51 por el suelo resbaladizo.

En horas de la tarde se pudo saber que los pasajeros ya habían consumido todas sus provisiones y el agua potable que tenían a su disposición. El jefe de gabinete de la Municipalidad local, Omar Berruet, y el intendente de Pringles, Aldo Mensi, se comunicaron con Defensa Civil de la Provincia para que auxilien a estas personas.

El funcionario confesó estar preocupado por las personas varadas en la ruta: “No hay forma de solucionarlo desde aquí con las maquinarias que hay”, disparó.

Asimismo, informó que “estamos esperando alguna noticia desde Defensa Civil nacional con quien 0se comunicó el intendente, para ver si pueden venir del Ejército a auxiliarlos. Hay colectivos y camiones en ese sector que están incomunicados, atascados en la nieve”, afirmó.


El comandante Swerdt completó informe

El jefe del cuerpo de bomberos local, Rufino Swerdt, dijo a ANDigital que los primeros llamados de auxilio los recibieron a las 7 de la mañana, un vehículo se había quedado en boulevard Uruguay y 85.

“Fuimos al lugar y ya era casi imposible llegar. Allí estaba una persona casi congelada”, relató el rescatista.

Asimismo, señaló que “había coches varados por todos lados. Fuimos a la rotonda de la Virgen y ya era general la alarma. También fuimos a buscar una familia que estaba por el paraje la Virginia, de allí trajimos seis personas y hasta esta hora (19.30) estuvimos trabajando sin parar”, aseguró.

También relató los momentos angustiantes que se vivían con las personas varadas en el Despeñadero, para ese lugar partieron varias dotaciones a las 19.

“Hay mucha gente varada, mucha gente que no puede ni para atrás ni para adelante porque los ha tapado la nieve. Llegamos hasta el arroyo las paletas con las máquinas de la municipalidad. Había dos micros con 70 personas, coches particulares donde hay familias con chicos; los camiones no serían tanto problema”.

“Nos fue imposible llegar a ellos, porque de guarda rail a guarda rail estaba pasando la nieve”, completó Swerdt.

Gente de una estancia cercana a los vehículos varados pudo avisar al cuartel de bomberos y alertarlos de la situación en El Despeñadero.

“Empujando la nieve se hicieron unos 2 a 3 metros de alto, así que se nos hizo imposible seguir adelante”, explicó el comandante describiendo la realidad de la nevada.


Ómnibus auxiliado a las 3 de la madrugada

Defensa Civil de Gobernación recién pudo llegar a 300 metros del micro cerca de las tres de la madrugada de este jueves, un gran número de automovilistas aislados en la nieve optaron por dirigirse caminando a estancias cercanas donde fueron alojados.

El titular de Defensa Civil, Mario Tejera, declaró a LU2 de Bahía Blanca, durante la mañana del jueves, que a las 3 de la madrugada se rescató a la gente que se hallaba varada en el colectivo de Plusmar (interno 1300) a unos 35 kilómetros de Coronel Pringles por la tormenta y la fuerte nevada.

Los hombres de salvataje llegaron al sitio donde se hallaban los pasajeros, con motopalas y orugas, pero sólo pudieron acercarse a pocas cuadras del bloqueo; las máquinas no pudieron seguir ante la muralla de nieve que se levantaba, por lo que debieron continuar a pie rescatando al pasaje para trasladarlo a Cabildo.

“Llegamos hasta ahí (El Despeñadero) gracias a una motoniveladora. Con gente del cuartel de bomberos de Bahía Blanca llegamos a casi 300 metros del micro. Nos llamaban conocidos y familiares de los que estaban en el colectivo. Una vez ahí conseguimos provisiones y después fueron traídos a Bahía alrededor de las 4”, declaró Tejera.

Por otra parte, informó que las rutas 33, 51 y 35 continuaban cortadas.

Durante la mañana de este jueves, los bomberos de Pringles comunicaron que la ruta provincial 51 permanecía totalmente cortada hacia Bahía Banca y hacia Buenos Aires congelada una mano, por lo que se pedía mucha precaución a quines debían transitarla.

Sucedía lo mismo por ruta 85 hacia la ciudad de Coronel Suárez y hacia Tres Arroyos, la situación era similar hasta la estancia “La Legua”.


El Fortín un mar de gente

Una de las instituciones tradicionalistas que abrió sus puertas para recibir automovilistas varados fue el Fortín Tradición y Libertad, en su sede de Dorrego y Francia. Allí, más de 70 personas pasaron la noche protegidos de las inclemencias climáticas.

En todo momento los albergados recibieron comida, colchones para pasar la noche, calor de hogar y la atención permanente de miembros de la entidad que dedicaron todo su tiempo a atender las necesidades de los visitantes.


Situación de las rutas

A última hora de este jueves, desde el cuartel de bomberos, el oficial Carlos Montenegro informó que la situación reflejaba que la ruta hacia la ciudad de Tres Arroyos estaba abierta al tránsito, “se puede circular con mucha precaución hasta la zona de Indio Rico, también la ruta que va a Coronel Suárez, que está en la misma situación, es un camino donde no hay mucha nieve pero puede helarse y hay que tener cuidado por lo resbaladizo”, advirtió.

En tanto, respecto a la ruta hacia Bahía Blanca, el oficial indicó que “si bien ya se ha rescatado a toda la gente que estaba varada, se está despejando de camiones que estaba aguardando en la zona”.

Los camiones que se habían cruzado en la ruta 51, camino a la ciudad bahiense, fueron retirados todos y estaban aproximándose a Coronel Pringles, según precisó el bombero.

De todos modos, y para ilustrar el enorme atascamiento que se produjo, apuntó: “La ruta continua cortada porque estamos hablando de que estaba en la nieve entre 140 y 150 camiones. Estará la ruta cortada hasta que pase todo eso, y hasta este viernes seguro no se va a poder abrir por la escarcha que es muy peligrosa”, completó.

También ilustró sobre el traslado de automovilistas que fueron llevados a campos cercanos a la ruta, entre ellos: San Claudio, donde estaba un grupo, “y también sacamos gente de la escuelita de La Amalia que estaban allí y nos enteramos cuando empezaron a funcionar los celulares este jueves a la mañana. Había 5 personas que se encontraban en perfecto estado”.

Aseguró que bomberos no atendió ningún caso de enfriamiento de personas por el asilamiento en la nieve: “Hubo gente que quedó atrapada en más de un metro y medio de nieve, estaban ahí, pasaron la noche pero no hubo que lamentar nada grave”.

Por último, Montenegro aseguró que la ruta que conduce a Buenos Aires estaba abierta totalmente y “está perfectamente normal”. Acerca de las personas asistidas en los albergues e instituciones de Pringles, manifestó que “la gente se está retirando toda, quedan algunas personas que son más precavidas y esperan que las rutas estén liberadas o que quieren pasar por Bahía mañana (por este viernes)”, concluyó. (ANDigital)

OPINÁ, DEJÁ TU COMENTARIO:
Más Noticias

NEWSLETTER

Suscríbase a nuestro boletín de noticias