Máxima atención al dolor de espalda que persiste más de tres meses

LA PLATA-BUENOS AIRES (ANDigital) La espondiloartritis axial es una enfermedad que afecta mayormente a hombres que a mujeres y se caracteriza por provocar dolor recurrente en la espalda baja (lumbalgia).

Si bien el dolor de espalda es una afección muy frecuente pues ocho de cada diez personas podrían padecerlo en algún momento de su vida, si permanece más de tres meses en personas menores de 45 años, podría deberse a una enfermedad crónica, de origen inflamatorio, denominada espondiloartritis axial.

Es importante diferenciar en forma precoz esta enfermedad, del dolor de espalda de tipo mecánico (el más frecuente), producto de una mala postura, esfuerzos laborales, lesiones deportivas y enfermedades degenerativas como artrosis entre otras, ya que el abordaje terapéutico para el padecimiento de origen mecánico es muy diferente al indicado para el de origen inflamatorio.

Para llegar al diagnóstico de manera temprana, es primordial caracterizar el tipo de dolor como inflamatorio y acudir al especialista reumatólogo.

En tal sentido, el doctor César Graf, presidente de la Sociedad Argentina de Reumatología, advierte: “el paciente típico es joven. El síntoma más preocupante es el dolor lumbar que se prolonga por más de tres meses y que tiene algunas particularidades especiales”.

“Suele aparecer de noche e incluso suele despertar al paciente con la necesidad de levantarse y caminar para que este dolor ceda. Se acompaña de rigidez lumbar matutina que mejora en el transcurso del día”, detalla el galeno.

Y completa: “algunos pacientes suelen tener inflamación de las articulaciones, más comúnmente de miembros inferiores como rodillas, caderas, tobillos o en tendones del pie”. También pueden presentar síntomas extraarticulares en ojos, pulmones, corazón, intestino y piel, entre los más frecuentes”.

A medida que avanza la enfermedad, sin diagnóstico ni tratamientos adecuados, los dolores se hacen cada vez más frecuentes y discapacitantes, pudiendo llevar a severas limitaciones en columna y articulaciones a temprana edad, con la consiguiente disminución de productividad laboral y calidad de vida.

Por su parte, la doctora Victoria Martire, especialista en reumatología del Instituto Médico Platense y Hospital San Martín de La Plata, miembro de la Sociedad Argentina de Reumatología, asegura que “la espondiloartritis axial es una enfermedad crónica, para la cual se dispone de tratamientos que permiten evitar la discapacidad y la baja calidad de vida de los pacientes”.

“El primer paso para que la evolución del paciente sea satisfactoria es el diagnóstico temprano siendo fundamental la consulta con el médico reumatólogo, quién mediante el interrogatorio, el examen físico y solicitando estudios específicos, puede orientar el diagnóstico correcto”, recalca la profesional.

El doctor Graf acota que si bien ha mejorado en los últimos años, el diagnóstico correcto puede demorar años. Además, afirma que “muchos pacientes son tratados por dolores de tipo mecánicos, se automedican con antiinflamatorios y realizan largos períodos de fisioterapia antes de acudir o ser derivados al médico reumatólogo”.

Con el objetivo de mejorar el diagnóstico temprano, especialistas en reumatología pertenecientes a diferentes centros públicos y privados de La Plata, otorgarán turnos gratuitos para aquellos que presenten síntomas de la enfermedad. La asignación se realizará del 26 de agosto hasta el viernes 13 de septiembre, llamando al 0800-220-0082 de lunes a viernes de 9 a 14 horas o ingresando a la web: www.pedirturno.com.ar.

El principal riesgo asociado al diagnóstico tardío es no acceder a un tratamiento adecuado. Existen diversos tratamientos disponibles para controlar la espondiloartritis como los que se basan en analgésicos, antiinflamatorios no esteroideos, los basados en fármacos antirreumáticos modificadores de la enfermedad, la fisioterapia y las terapias biológicas.

Expertos reumatólogos estiman que un dolor puede ser inflamatorio si se éste persiste por más de tres meses o si al menos cuatro de las siguientes cinco preguntas se responden de forma afirmativa:

---) ¿Comenzó a tener dolor de espalda antes de cumplir los 40 años?

---) ¿El dolor de espalda se ha ido incrementando gradualmente?

---) ¿Mejora su dolor de espalda con actividad física/movimiento?

---) ¿Le parece que el dolor de espalda no mejora cuando descansa?

---) ¿Su dolor de espalda lo/a despierta por la noche y lo/a obliga a levantarse?

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