Por falta de gas, 800 estudiantes de Pedro Luro van a la escuela una vez por semana

VILLARINO-BUENOS AIRES (ANDigital) Hace un mes, el bloque de concejales de Unidad Ciudadana-PJ de Villarino presentó sendos proyectos manifestando la preocupación por el retiro de medidores de gas y deficiencias de infraestructura en tres establecimientos educativos de Pedro Luro, la localidad más poblada del partido bonaerense de Villarino.

En concreto, la inquietud radicaba en que las escuelas de Educación Secundaría N° 1, de Educación Primaria N ° 33 y el Jardín N° 910 recibieron los primeros fríos sin el servicio de gas (por ende sin calefacción), una problemática que está aún lejos de resolverse adecuadamente.

“Solicitamos que la subsecretaria de Obras y Servicios Públicos del Municipio, Valeria Miguel, informe a este cuerpo los motivos por los cuales aún no se realizaron las obras necesarias para restituir los medidores de gas natural”, expusieron los ediles en alusión al retiro preventivo efectuado por la empresa Camuzzi, tras una rotura en las instalaciones.

También “si se han llevado a cabo gestiones por parte de la inspectora jefe distrital de Educación de Villarino, Flavia Stalldescker y la directora provincial de Infraestructura Escolar, Yanina Martínez para remediar la situación” que tampoco tuvo respuesta en la órbita del economista Gabriel Sánchez Zinny, a cargo de la Dirección General de Cultura y Educación de la Provincia.

Pasados los meses propicios para encarar las obras y llegando el crudo invierno en la localidad del sudoeste bonaerense, la bancada de Unidad Ciudadana-PJ lamenta no haber obtenido dictamen, lo que dilata aún más la resolución de las penurias.

“El Jardín Nº 910 se inauguró a fines de marzo sin el acta de Educación que lo habilite. Hoy sigue sin tener gas y con ciertas deficiencias de infraestructura, al menos en este caso se han comprado diferentes artefactos de frío-calor y sólo fueron un par de días sin clases”, detalló ante ANDigital el concejal peronista Fabián Marlia.

Por otra parte, está la escuela secundaria “más grande del distrito, donde concurren 800 pibes en tres turnos; y la primaria, que es una de las más antiguas y funciona en doble turno, aunque por la noche funciona el Instituto de Formación Docente Nº 69”, precisó.

“Actualmente la 33 empezó a funcionar aunque en horario reducido, se pudieron comprar para cada una de las aulas aparatos de frío-calor abastecidos de energía eléctrica. Se tuvo que hace una obra para cambiar cables, centrales para resistir las conexiones y esperan que la empresa que adjudicó la obra de gas comience a trabajar”, indicó el edil y también docente de la secundaria en cuestión.

De todos modos, expresó que “en la secundaria no es posible poner artefactos en todas las aulas y si la obra de gas salía 1,2 millones de pesos; el recambio y los artefactos saldrían lo mismo, estaríamos ante un doble gasto. Los pibes están sin ir a la escuela por deficiencias del Consejo Escolar, del Ejecutivo y del Ministerio de Infraestructura provincial”.

“Apenas tres aulas tienen calefacción, con buen tino los directivos han hecho rotar a los chicos, son 34 cursos. Una vez por semana los profesores les damos la tarea para continuar como se pueda con el plan pedagógico”, informó, lamentando la “inoperancia” de las autoridades que atentan contra la calidad de enseñanza. (ANDigital)