La espera del último Presupuesto de Scioli y la incógnita sobre su sucesor

La mirada se concentra en un sólo objetivo, los deseos priman sobre ese sueño y las acciones -en su mayoría- están sobre ese fin. Daniel Scioli y su equipo ocupan sus horas en plasmar táctica y estrategias para lograr llegar a la Casa Rosada. La cuenta regresiva para las elecciones generales de octubre ya ha comenzado y los tiempos apremian. Eso lo sabe el aún gobernador bonaerense, su equipo de campaña también. Reina la ansiedad y la adrenalina, el objetivo de ganar en primera vuelta es lo que domina sus mentes. Prioridades de existencia.

Sin embargo, el tablero político bonaerense espera por un anuncio de gran trascendencia para el 2016 que se avecina. Cómo estará configurado el Presupuesto 2016 de Scioli, el último de su mandato y el primero que tendrá para ejecutar su sucesor o sucesora. Como un vieja costumbre, otro año más el plazo formal para la presentación de la “Ley de leyes” que el sciolismo tiene que mostrar sobre la mesa ha vencido y hasta ahora no se han mostrado señales de cuál será el esquema de gastos y proyecciones económicos que dejarán para el próximo ocupante del Sillón de Dardo Rocha. Cabe recordar que el Artículo 103 de la Constitución Bonaerense sostiene: “Si el Poder Ejecutivo no remitiera los proyectos de presupuesto y leyes de recursos para el ejercicio siguiente antes del 31 de agosto, la Legislatura podrá iniciar su estudio y sancionarlos, tomando por base las leyes vigentes. Vencido el ejercicio administrativo sin que la Legislatura hubiese sancionado una nueva ley de gastos y recursos, se tendrán por prorrogadas las que hasta ese momento se encontraban en vigor”. Esa fecha legal ya está muy detrás en este camino y la espera continúa. Incógnitas sobre el escenario I.

En sus casi ocho años de mandato Scioli en su mayoría no presentó el Presupuesto antes de la fecha mencionada, casi como una tradición táctica. Su estrategia se cimentó en esperar a la presentación del Presupuesto de la Nación y así diagramar el provincial. Hace más de una semana, el ministro de Economía, Axel Kicillof, presentó en la Cámara de Diputados de la Nación el proyecto de Ley de Presupuesto Nacional 2016, que –entre otras cosas- contempla continuar con la asistencia financiera de China, impulsar los planes Procrear y Precios Cuidados, la Red de Televisión Digital Abierta, en medio de un panorama incierto en torno a los mercados internacionales. Además, prevé una inflación del 14,5 por ciento, un dólar oficial a un promedio de 10,60 pesos, pero que subirá a 11,20 pesos en diciembre del año próximo, y un crecimiento del PBI en torno al 3 por ciento. La señal esperada.

Tras conocer los detalles del Presupuesto Nacional ahora se espera que Scioli y sus ministros comiencen a darle más forma al Presupuesto Provincial. Según fuentes del gobierno bonaerense, el equipo económico de la administración sciolista aún no plasmó sobre la mesa los números finos para el año que viene y por ahora solo se intercambiaron los conceptos generales. Pero el dato que sobresale en este escenario es que el sciolismo va a “coordinar todos los puntos del Presupuesto 2016 con Aníbal Fernández”. La certidumbre es grande en el Frente para la Victoria y sólo en sus peores pesadillas ven una derrota del Jefe de Gabinete nacional en la elección por la Gobernación. El optimismo naranja inundó al kirchnerismo.

Con esas premisas, fiel a su costumbre, Scioli guarda bajo siete llaves los puntos finos de lo que va a ser el bonaerense Presupuesto 2016. Sin embargo, ANDigital pudo saber detalles importantes de los primeros diagramas de lo que será el plan de gastos del año que viene. Desde hace semanas, Aníbal y su equipo mantienen frecuentes reuniones y conversaciones telefónicas con distintos ministros y funcionarios bonaerenses. En sus planes sobre un hipotético gobierno se focaliza en la creación de un “Superministerio para el campo”, que en otras palabras en darle más estructura y presupuesto al actual Ministerio de Asuntos Agrarios. Incluso, esa cartera tiene el nombre de su posible conductor: Gabriel Delgado, actual secretario de Agricultura de la Nación, número 2 de Carlos Casamiquela. Proyecciones paulatinas.

El dato, que seguramente será tratado con detenimiento a la hora de confeccionar el Presupuesto provincial 2016, es que este “Superministerio” necesita una revisión de la estructura organizativa del Ministerio de Asuntos Agrarios, cuestión que ya está siendo trabajada con personal del equipo de Fernández y funcionarios bonaerenses. Dentro de esas charlas, la estructura que se maneja vislumbra que se sumen áreas de distintos ministerios como Infraestructura y Producción, ya que pretenden que la nueva cartera de Asuntos Agrarios maneje el Plan de Cuencas. En lo concreto, más presupuesto para ese “Superministerio” es un factor clave y que requerirá algunas modificaciones en los monto destinados a cada cartera. El Presupuesto 2015 de Scioli fue de 246.000 millones de pesos. Obviamente, los gastos para el 2016 serán un monto superior ya que tienen que ser actualizados. En lo concreto, más allá del deseo de que Aníbal y FpV logren retener la Gobernación bonaerense por cuatro años más, en los diagramas reales se trabaja como si el candidato oficialista ya habría ganado la elección provincial. El deseo de retener la Provincia para el FpV.

Bajo este escenario, en los pasillos de la Legislatura bonaerense los ruidos sobre la presentación del Presupuesto 2016 empezaron a sonar pero sin muchos ecos. Se concretaron algunas reuniones entre miembros de la Comisión de Presupuesto de Diputados con ministros provinciales, pero sin muchos detalles dejados sobre el tablero. La tropa oficialista espera con mucha tranquilidad el envío del Proyecto de Presupuesto 2016, no se muestra ansiosa y hasta saca chapa de que los números en ambas Cámaras les son favorables, producto de las fugas que hubo del massismo hacia el FpV y otros espacios políticos. En los análisis que realizan por ahora sostienen que su diagrama será muy parecido al que fue presentado en 2015 con los “aumentos porcentuales obvios” de cada año para cada área. Sin embargo, el otro dato que sobresale es que en su conjunto los legisladores del kirchnerismo esperan que la “Ley de leyes” recién sea aprobada una vez que se conozca quién será el ganador de las elecciones de octubre y se sepa el nombre del próximo gobernador/a. Incógnitas sobre el escenario II.

En general el Frente para la Victoria, con sus matices, confía en que Scioli gane las elecciones nacionales (el objetivo es primera vuelta) y que Aníbal haga lo propio en la Provincia. Los Presupuestos 2016 Nacional y Provincial se van diagramando en base a las necesidades de cada candidato oficialista. Pero más allá de la fe y los deseos, está la posibilidad de una derrota. En el Congreso Nacional el oficialismo necesita de más voluntades para aprobar la “Ley de leyes” y es probable que se plasme cuando se sepa quien se sentará en el Sillón de Rivadavia. En el terreno bonaerense, si bien el oficialismo cuenta con mejores números a la hora de las votaciones, desde el propio FpV reconocieron que su tratamiento se dará después de las elecciones de octubre. Cabe recordar que en la Provincia no existe el balotaje y el que gane -aunque sea por un voto- será el próximo gobernador/a. El mandamiento de los comicios.

Mientras tanto, en el escenario que más preocupa al kirchnerismo, a poco más de una mes para que las urnas den su veredicto final y se sepa quién será el sucesor de Daniel Scioli en la provincia de Buenos Aires, la Consultora Circuitos realizó una reciente encuesta, con fecha de relevamiento del 14 al 16 de septiembre de 2015 y en base a un muestreo que abarca la 1ra y la 3ra secciones electorales de la Provincia de Buenos Aires y el Interior, representados con 37 partidos, contemplando los tres cordones del GBA y los partidos del Interior. En ese trabajo, ante la consulta “si las elecciones a gobernador de la provincia de Buenos Aires fueran hoy, usted a quién votaría”, los resultados arrojaron que Aníbal Fernández obtiene un 33,4 por ciento; María Eugenia Vidal 33 por ciento; Felipe Solá 18,2 por ciento y Néstor Pitrola 5,5 por ciento. Un virtual empate técnico entre el candidato del kirchnerismo y la candidata del PRO. Final de carrera, cabeza a cabeza.-