Cambian al Jefe Departamental de policía de La Plata

LA PLATA-BUENOS AIRES (ANDigital) La Jefatura Departamental de Policía de La Plata ha sido uno de los puestos más difíciles en los últimos años luego de que estalló el escándalo de la causa de los sobres que terminó con die policías procesados acusados de conformar una asociación ilícita. El caso fue conocido como “la causa de los sobres” y se llevó puesto a Darío Camerini.

Tras su desplazamiento asumió Diego Bravo quien en ese entonces se había desempeñado como jefe del distrito Norte de La Plata. Arriba de Bravo en la jerarquía se impuso un nueve jefe en la Superintendencia Sur designándose al frente a Edgardo Quintela. Hoy ninguno de los dos sigue al frente ya que Quintela dejó el cargo por cuestiones de salud y Bravo pidió ser relevado al aducir un desgaste propio de la función.

En lugar de Quintela asumió entonces Marcelo Corbalán. Este viernes el Comisario Mayor Javier Martínez pasó a reemplazar a Bravo al frente de la Jefatura Departamental de La Plata. Según pudo saber ANDigital se trata de un hombre con buenos vínculos con el director de Asuntos Internos Guillermo Berra y no se le conocen “roces” con el jefe de la policía Fabián Perroni.

“Martínez es un hombre más allegado a Berra que a Perroni o (Cristian) Ritondo”, señalaron fuentes policiales que conocen la carrera del flamante Jefe Departamental.

Como antecedente Martínez tiene experiencia al frente de la Jefatura Departamental de San Vicente, cargo que ostentó hasta mediados de 2017. Llegó a la Comisaría Primera de La Plata luego de que Asuntos Internos decidió desplazar al Comisario Pablo Orgoñez y acusarlo en una causa por manejos irregulares de horas extras que hasta el momento avanzó poco y nada. De hecho en la justicia penal nada pudieron probarle a Orgoñez y la decisión administrativa tomada por la entidad que maneja Berra no tiene fundamentos sólidos.

Ruido

Javier Martínez fue denunciado en 2017 por Gabriel Vicente Bautista, un vecinos de Adrogué que compró una vivienda haciendo un acuerdo previo con Mario Amillara Culotta. La propiedad se ubica en Somelera al 355.

Según las referencias que se dan en el caso Culotta murió y no pudieron terminarse los trámites de escrituración, razón por la cual el comprador se puso en contacto con los herederos. Allí algunos reconocieron la venta y otros no.

Con el fin de arreglar el asunto se dispuso que un sereno cuide la propiedad hasta que finalice el papeleo.

“De buenas a primeras se presentó el Comisario Javier Martínez explicando que la propiedad era de su pertenencia y le dijo a Bautista que no se meta si no quería tener problemas, que se olvide de la casa”, señaló una fuente del caso que fue denunciado en Asuntos Internos.

Luego de su descargo Bautista dio cuenta de todo tipo de amenazas en su contra: balas en el capó de su automóvil, llamados intimatorios e informaciones que daban cuenta de datos de su familia: “Tuve que soportar choques a mi vehículo con autos que escapaban a toda velocidad de la escena”, contó Bautista.

En Asuntos Internos la denuncia contra Martínez no fue suficiente para desplazarlo del cargo a diferencia de otros uniformados que con un mero descargo ya fue suficiente para desplazarlos. Ante este escenario cabe preguntarse: ¿Se mide a todos con la misma vara? (ANDigital)