jueves 28 de marzo de 2024 - Edición Nº3659

Policiales y Judiciales | 8 sep 2018

Fuero Penal platense

Abusos en el Próvolo: Afirman que el Vaticano estaba al tanto de todo

Lo refirió la fiscal del caso, Cecilia Corfield, quien manifestó ante ANDigital que desde el establecimiento religioso-educativo ubicado en 47 y 25 de La Plata se informó a la Santa Sede vía fax sobre los aberrantes episodios por los cuáles están detenidos los sacerdotes Nicolás Bruno Corradi Soliman y Horacio Corbacho. Exdocentes aportarán más datos. No se descarta el pedido de detención para varios cómplices.


LA PLATA-BUENOS AIRES (ANDigital) El Instituto Antonio Próvolo fue fundado en Verona a principios del siglo XIX. Desde allí sentó los cimientos y abrió sedes que dependen del Vaticano. Entre las dependencias que tenían línea directa con la Santa Sede se encuentra la de La Plata y la de Luján de Cuyo, provincia de Mendoza.

A 24 horas del allanamiento que la fiscal Cecilia Corfield (UFI 15) hizo efectivo en el Instituto religioso-educativo Antonio Próvolo de La Plata, ubicado en 47 y 25, ANDigital pudo conocer nuevos detalles de una investigación iniciada en el año 2016, momento en el cual estaba a cargo el ahora exinstructor Fernando Cartasegna.

Tras la publicación de una nota periodística difundida por un matutino platense, Cartasegna decidió iniciar las primeras actuaciones de oficio y llegó a establecer que los sacerdotes Nicolás Corradi y Horacio Corbacho, a pesar de no estar en ese entonces en La Plata, estaban sindicados como autores responsables de aberrantes delitos contra la integridad sexual en perjuicio de niños hipoacúsicos de entre 3 y 17 años.

Luego del escándalo que derivó en su retiro de la función pública, la causa quedó a la deriva hasta que el fiscal general de La Plata, Héctor Vogliolo, repartió todos los expedientes que se encontraban en la hoy disuelta fiscalía 4 de Cartasegna, al resto de las fiscalías.

En esa repartija, la incompleta investigación recayó dos semanas atrás en la fiscalía de Corfield, quien a 15 días de recibirla ya la engrosó con documentación secuestrada en el Instituto a partir del allanamiento que el juez de Garantías Jorge Moya Panisello le autorizó el pasado 4 de septiembre.

El procedimiento se llevó a cabo con la asistencia de uniformados de la DDI La Plata, de Policía Científica y contó con la particularidad de que también trabajaron arquitectos.

La explicación a esta última cuestión obedece a que una de las víctimas que declaró al inicio de la causa elaboró un plano a pulso del interior del Próvolo, por lo que ahora con personal técnico abocado a la cuestión, los investigadores tendrán más precisiones sobre cómo se encuentran distribuidos los espacios en el espacioso edificio del barrio La Loma. Uno de los fines de la diligencia fue realizar una completa inspección ocular.

ANDigital pudo saber que los detectives no sólo incautaron documentación (fotos de jóvenes alojados décadas atrás, de encargados, docentes y sacerdotes), sino que también elementos que coinciden con las testimoniales aportadas con los cuales se torturaba a las víctimas.

“Nos obligaban a arrodillarnos en maíz y sal para rezar durante cuatro horas”. Este era uno de los castigos más habituales y eran según la hipótesis oficial de acusación la mayoría de los abusos ocurrieron desde la década del 80 hasta el año 2007. Daniel Sgardelis fue uno de los primeros en denunciar a Corbacho y Corradi, hoy vive en la provincia de Salta y su testimonio fue volcado a la causa con ayuda de una intérprete.

Fuentes de la investigación señalaron que son varios los nombres que están bajo sospecha además de los curas que hoy están presos en Mendoza. “En el operativo se incautó mucha documentación relacionada con los alumnos que habrían sido víctimas pero también hay información sobre quienes ejercían algún tipo de tarea en el Instituto-Hogar. Corradi, Eliseo Pirmati, los hermanos Britez, la directora Susana, la maestra Zampoli, Alicia Gatu, o Gaura, y las monjas Mónica y Leticia, son algunos de los nombres y cargos más comprometidos en la investigación”, reveló un vocero judicial.

Desde la fiscalía 15 señalaron que “existen comunicaciones vía fax en las cuáles se le notificaba a la Santa Sede sobre los hechos ocurridos en el Próvolo de La Plata”.

En tanto, Sergio Cavaliere, abogado de una de las más de 20 víctimas de abusos sexuales ocurridos en Verona Italia ya había manifestado en 2016 mediante declaraciones periodísticas que “el Papa Francisco conocía los casos y no hizo nada al respecto”.

El letrado pidió que el Vaticano entregue los nombres de las víctimas volcados en sus archivos. Si bien muchos de los ataques sexuales denunciados en la justicia ya prescribieron, Cavaliere pide que sean imprescriptibles y que se los considere delitos de lesa humanidad.

Mientras esa contienda judicial continúa en el Viejo Continente, en la ciudad de La Plata la fiscalía 15 sigue juntando declaraciones de testigos y damnificados que pueden acercarse a la sede de la dependencia ubicada en 54 entre 6 y 7 de lunes a viernes 8 a 14 horas. (ANDigital)

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