Nueva diligencia en el Instituto Próvolo

LA PLATA-BUENOS AIRES (ANDigital) Detectives de la DDI La Plata llegaron al lugar a pedido de la fiscal Cecilia Corfield y con el aval del juez de Garantías Jorge Moya Panisello, para hacer una inspección ocular junto con algunas de las víctimas.

La causa por abuso sexual se inició en 2015 en la Fiscalía 4, que en ese entonces era la especializada en este tipo de hechos y estaba a cargo de Fernando Cartasegna. Tras el escándalo que derivó en la renuncia del instructor, a fin de evitar ser echado mediante un jury, el expediente quedó a cargo de Cecilia Corfield (UFI 15).

La fiscal reactivó la investigación y la primera semana de septiembre de 2018, allanó el edificio que el Instituto religioso Antonio Próvolo posee en 47, entre 26 y 27, del barrio platense La Loma. Este viernes volvió al lugar junto con víctimas, a fin de llevar a cabo una inspección ocular en todo el predio.

Con la colaboración de efectivos de la DDI La Plata, registraron en video todo el lugar. "Se busca tener precisiones sobre qué sitios eran los utilizados por los sacerdotes y civiles para emplear los reiterados abusos sexuales contra niños sordomudos", reveló un vocero de la investigación ante este medio.

Cabe señalar que uno de los denunciantes que motivó el avance del expediente es Daniel Sgardelis, quien se radicó en la provincia norteña de Salta, tras exponer que durante su niñez (década del 90) fue víctima de reiterados ataques sexuales en el Próvolo a manos de religiosos.

Se cree que hay al menos 17 víctimas de estos abusos que en La Plata habrían tenido lugar entre la década del 80 y principios de los años 90.

"No sólo eran humillaciones de índole sexual, también se denuncian ataques físicos y verbales en la causa”, refirió ante ANDigital una fuente con acceso total a la investigaciones.

Por estos hechos, los sacerdotes que pasaron por La Plata, Horacio Corbacho y Nicola Corradi, fueron trasladados primero a Luján y luego a Mendoza, al saber que estaban bajo investigación.

Acto seguido quedaron detenidos en esa provincia cuyana, acusados de graves delitos contra la integridad sexual de menores a los que tenían a su cuidado.

Hoy, Corradi se mantiene con prisión domiciliaria debido a su avanzada edad, mientras que Corbacho está alojado en la unidad penal Sur Mer.

Fuentes de la investigación no descartaron que en las próximas horas la justicia ordene la detención de más personas implicadas en los abusos.

La fiscal continúa en busca que pruebas a fin de avanzar en la investigación. (ANDigital)