miércoles 24 de abril de 2024 - Edición Nº3686

Policiales y Judiciales | 26 sep 2019

Por crimen atroz

Prisión perpetua para asesinos que degollaron a octogenaria

Lo determinó el Tribunal en lo Criminal Nº 3 de la ciudad de Bahía Blanca. Andrés Pontaut y su pareja, Alejandra Suárez, fueron encontrados culpables por el horrendo crimen cometido en la persona de María del Carmen Pontaut, en marzo de 2018 en Coronel Pringles.


CORONEL PRINGLES-BUENOS AIRES (ANDigital) La pareja condenada había cometido el crimen de la octogenaria en Coronel Pringles, con un ensañamiento brutal. La apuñalaron para luego degollarla y presenciaron con crueldad cómo la víctima se desangraba y moría, causándole un sufrimiento indescriptible. María del Carmen Pontaut no podía movilizarse sola y se hallaba semidormida en una silla de ruedas cuando la atacaron.

El brutal crimen ocurrió el 6 de marzo de 2018, entre las 12.30 y 15.08, en la vivienda de la víctima, Dorrego al 1.300. El cuerpo de la mujer fue hallado por el hijo del acusado.

La prisión perpetua fue impuesta por el Tribunal en lo Criminal Nº 3 bahiense a Andrés Pountaut y Alejandra Suárez, la pareja que asesinó salvajemente a la mujer de 80 años (era tía de Andrés Pontaut) a principios de 2018.

La pena de prisión perpetua le impuso el Tribunal en lo Criminal Nº 3 a esta pareja acusada de asesinar salvajemente a una mujer de 80 años a principios de 2018 en Coronel Pringles.

El juicio oral se concretó en Bahía Blanca los días 16, 17 y 18, en los que se conocieron testimonios desgarradores sobre la muerte que le dieron los condenados a la víctima.

La resolución de los jueces Eduardo d´Empaire, Daniela Fabiana Castaño y Eugenio Casas, quienes dictaron la sentencia, coincidió con el pedido realizado durante los alegatos por el fiscal del caso, Jorge Viego. Pontaut y Suárez fueron imputados de homicidio calificado por alevosía, ensañamiento, codicia y criminis causa.

El fiscal sostuvo durante el debate, que los imputados actuaron con la finalidad de apoderarse de dinero y otros elementos, “procurando para sí la impunidad, así como también con el propósito de percibir una futura herencia y finalmente provocarle sufrimiento” a la víctima.

En otro orden de cosas, Viego indicó que ultimaron a “Tuta” Pontaut (así se la conocía en Pringles), aprovechándose de su estado de indefensión, tratándose de una mujer de avanzada edad, quien se movilizaba en una silla de ruedas y vivía sola.

El fiscal mencionó uno a uno los agravantes, criminis causa porque el homicidio “se cometió procurando la impunidad de apoderamiento en la casa de Pontaut”. Alevosía por la indefensión de la víctima, ensañamiento por los excesos que implicaron sufrimiento innecesario a la víctima a la hora de matarla, que se desprende de los mensajes. “La hacían gritar como un cordero”, dijo Viego.

El último agravante mencionado fue la codicia. “Está claro que conocían el testamento. Es el nexo necesario de Pontaut para hacerse de esa herencia”, concluyó el agente público.

Alejandra Suárez escuchó la sentencia, Andrés Pontaut no quiso estar presente en el dictamen. Ambos procesados se encuentran detenidos en la Unidad Penal de Villa Floresta. (ANDigtal)

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