Política | 22 mar 2014
Informe ANDigital
Un candidato a vice que condiciona al propio PJ y a Scioli
El ministro bonaerense Baldomero Álvarez salió a pedir la renuncia del apoderado del PJ, Jorge Landau, por su asesoramiento técnico y legal sobre las listas de adhesión a Sabbatella. Los celos por la posibilidad de que Julián Domínguez sea el candidato de la Rosada para acompañar a Scioli, y la advertencia de los intendentes del Conurbano que ya muestran sus dientes.
LA PLATA-BUENOS AIRES, Abril 28 (ANDigital) Desde la muerte de Néstor Kirchner, el gobernador bonaerense, Daniel Scioli, ocupa la presidencia del PJ nacional, aunque la conducción esté a cargo de la propia Cristina Fernández. Y en el peronismo, algunos históricos dirigentes del Conurbano ya empezaron a “mostrar sus dientes” ante el escenario electoral de octubre próximo.
No cayó para nada bien entre los popes del Gran Buenos Aires las listas de adhesión. Es que los intendentes analizan con números en la mano que una boleta de más del oficialismo no solamente pueden perder terreno en sus concejos deliberantes, sino también hasta el sillón municipal.
Los resultados de 2009 dejaron a algunos entre las cuerdas, y fue una advertencia para los comicios venideros.
Tampoco les cae simpático que el líder de Nuevo Encuentro, Martín Sabbatella, obtuviera una lista de adhesión del orden provincial (competirá con Scioli la gobernación), y por ende, en los municipios. De esta forma, el sabbatellismo se asegura el acompañamiento de CFK en distritos claves como Merlo, Morón, Ituzaingó, Tres de Febrero y tantos otros.
Pero si algo le faltaba digerir al peronismo bonaerense del Conurbano es que el apoderado del partido, el diputado nacional Jorge Landau, se reuniera con Sabbatella para asesorar técnicamente al dirigente en el uso de las listas de adhesión.
No parece ilógico que siendo el apoderado del PJ realice asesoramiento a uno de los que integrará la ingeniería electoral kirchnerista, pero esta actitud sirvió para que un sector del peronismo pusiera reparo a la continuidad de Landau.
Sorpresivamente este miércoles por la noche, el ministro de Desarrollo Social de Scioli, Baldomero Álvarez de Olivera, salió a pedir la “cabeza” de Landau por su comportamiento solitario en cuestiones del partido.
Sin duda que el dato político no es sólo la revolución interna del peronismo, si no que también es una forma de marcar la cancha al propio peronismo dentro de los liderazgos territoriales.
Baldomero Álvarez quiere acompañar a Scioli en la fórmula. Se autodenominó como el candidato más potable, luego de una escalada de versiones que indicaban que el “número 2” del gobernador tiene que poseer el visto bueno de la Casa Rosada.
Ante la insistencia de que el ministro de Agricultura nacional, el bonaerense Julián Domínguez, sea el bendecido del kirchnerismo, Baldomero recordó que los intendentes del GBA también quieren tener lugares estratégicos en el armado electoral.
Tras la noticia del pedido de renuncia a Landau, el apoderado reconoció que “el malestar es lógico, es comprensible, no lo niego” por las listas de adhesión, pero aclaró: “Lo que hay que hacer es tratar de encontrar una fórmula equilibrada que permita incluir los intereses de unos y de otros”.
“Están los intereses de los intendentes, de los gobernadores y de la Presidente. Cuando uno arma una oferta electoral tiene que subordinar unos intereses a otros y armonizar entre todos una oferta integral y única”, continuó.
En el peronismo bonaerense las cosas están que arden porque el propio ministro de Scioli, actual conductor del partido, ya mostró que los jefes comunales no cederán territorio si habilitan a más candidatos kirchneristas en sus municipios.
Mientras tanto, Landau fue categórico: “En todo caso me removerán, pero yo no renuncio”. (ANDigital)
No cayó para nada bien entre los popes del Gran Buenos Aires las listas de adhesión. Es que los intendentes analizan con números en la mano que una boleta de más del oficialismo no solamente pueden perder terreno en sus concejos deliberantes, sino también hasta el sillón municipal.
Los resultados de 2009 dejaron a algunos entre las cuerdas, y fue una advertencia para los comicios venideros.
Tampoco les cae simpático que el líder de Nuevo Encuentro, Martín Sabbatella, obtuviera una lista de adhesión del orden provincial (competirá con Scioli la gobernación), y por ende, en los municipios. De esta forma, el sabbatellismo se asegura el acompañamiento de CFK en distritos claves como Merlo, Morón, Ituzaingó, Tres de Febrero y tantos otros.
Pero si algo le faltaba digerir al peronismo bonaerense del Conurbano es que el apoderado del partido, el diputado nacional Jorge Landau, se reuniera con Sabbatella para asesorar técnicamente al dirigente en el uso de las listas de adhesión.
No parece ilógico que siendo el apoderado del PJ realice asesoramiento a uno de los que integrará la ingeniería electoral kirchnerista, pero esta actitud sirvió para que un sector del peronismo pusiera reparo a la continuidad de Landau.
Sorpresivamente este miércoles por la noche, el ministro de Desarrollo Social de Scioli, Baldomero Álvarez de Olivera, salió a pedir la “cabeza” de Landau por su comportamiento solitario en cuestiones del partido.
Sin duda que el dato político no es sólo la revolución interna del peronismo, si no que también es una forma de marcar la cancha al propio peronismo dentro de los liderazgos territoriales.
Baldomero Álvarez quiere acompañar a Scioli en la fórmula. Se autodenominó como el candidato más potable, luego de una escalada de versiones que indicaban que el “número 2” del gobernador tiene que poseer el visto bueno de la Casa Rosada.
Ante la insistencia de que el ministro de Agricultura nacional, el bonaerense Julián Domínguez, sea el bendecido del kirchnerismo, Baldomero recordó que los intendentes del GBA también quieren tener lugares estratégicos en el armado electoral.
Tras la noticia del pedido de renuncia a Landau, el apoderado reconoció que “el malestar es lógico, es comprensible, no lo niego” por las listas de adhesión, pero aclaró: “Lo que hay que hacer es tratar de encontrar una fórmula equilibrada que permita incluir los intereses de unos y de otros”.
“Están los intereses de los intendentes, de los gobernadores y de la Presidente. Cuando uno arma una oferta electoral tiene que subordinar unos intereses a otros y armonizar entre todos una oferta integral y única”, continuó.
En el peronismo bonaerense las cosas están que arden porque el propio ministro de Scioli, actual conductor del partido, ya mostró que los jefes comunales no cederán territorio si habilitan a más candidatos kirchneristas en sus municipios.
Mientras tanto, Landau fue categórico: “En todo caso me removerán, pero yo no renuncio”. (ANDigital)
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