Férreo rechazo de la UCR a la reforma política

CAPITAL FEDERAL, Diciembre 03 (ANDigital) La Unión Cívica Radical, en boca de su presidente, Gerardo Morales, expresó su rechazo a la reforma política impulsada por el Gobierno de Cristina Fernández de Kirchnre y aprobada este miércoles en el Senado de la Nación.

“El resultado electoral del 28 de junio pasado, con el 70% del electorado en contra del gobierno, fue el germen de esta reforma política”, estimó el senador jujeño, al tiempo que señaló que “el diálogo político al que la UCR apostó para el fortalecimiento institucional fracasó y se redujo a una reforma electoral”.

Como presidente de la UCR, Morales expresó el “compromiso” de su partido en participar de un debate en marzo próximo y “votar una nueva ley en abril del año que viene” ante la negativa del bloque del FpV.

“En la base de este proyecto está la desmedida ambición de poder de Néstor Kirchner”, enfatizó el senador y destacó que “como saben que tampoco van a ganar con esta reforma se han garantizado la caja, el crédito, un gobierno paralelo o un gobierno directo saltando la representación”.

En igual sentido, expresó que “el Gobierno intenta ver cómo gana en la corta, pero corre el riesgo de la deslegitimación con la gente”, y agregó que “buscan un atajo, pero no se llega con atajo. Por lo tanto, no estamos dispuestos a convalidar este atajo y lo votamos en contra”.

Morales hizo un resumen de las actitudes que han precedido al proyecto que llega en revisión en la Cámara Alta. “El gobierno cambió las reglas de juego con el cambio de la fecha de las elecciones; insistió con la presión, la coacción y la captación de dirigentes opositores; incluso han discriminado a gobernadores o intendentes por ser radicales; desarrolló las colectoras y las candidaturas testimoniales”, enumeró.

En igual tenor, explicitó que “el kirchnerismo empezó con la UCR porque para desarrollar un proyecto de poder tan duro necesita destruir la principal fuerza política nacional que está en todo el país”.

“Para el radicalismo una reforma política es cambio cultural; en este caso estamos considerando un cambio del código electoral y el sistema de financiamiento de la política”, aseguró el legislador, mientras que destacó que “el diálogo para leyes constitucionales que requieren mayorías especiales es fundamental, por eso el Gobierno ha logrado un ámbito de debate, pero no ha garantizado un ámbito de consenso”.

En esa dirección, el senador ejemplifico: “el Acuerdo Cívico y Social obtuvo 5.800.000 votos, apenas 100 mil de diferencia con el Frente para la Victoria en todo el país; y Unión Pro, en la provincia de Buenos Aires, le ganó al principal referente del oficialismo, sin embargo, ni el ACyS ni Unión Pro, ni los partidos de izquierda apoyan este proyecto”.

“El mayor consenso va a ser el mejor aporte a la democracia”, enfatizó y añadió que “sólo si se consolida la base del sistema de representación se fortalece la democracia; sin embargo la actitud del Gobierno sigue empujando la sanción de leyes a su medida. No consigue masa crítica y desnuda la verdadera intensión del gobierno: una ley para ganar las próximas elecciones”.

Por otra parte, adelantó que “la UCR está dispuesta a votar una reforma del código electoral, pero con reglas claras entre las fuerzas políticas y con confianza entre los partidos políticos y las instituciones de la República”.

Si bien el radicalismo acuerda con el modelo de financiamiento público, “la gran debilidad del proyecto se centra en las mayores facultades de la autoridad política central en detrimento de la Cámara Electoral Federal, poniendo en riesgo la transparencia y confianza”, advirtió.

“La iniciativa tiene varias imprecisiones y temas importantes que no aborda: las listas espejo y colectoras, que fueron un gran aporte a la confusión que hizo el kirchnerismo en las últimas elecciones”, indicó al respecto, y sostuvo que “esta era una oportunidad para sancionar las candidaturas testimoniales que han terminado engañando la voluntad de la gente”. (ANDigital)