La vigencia de la Revolución del Parque

Hace 119 estallaba la gloriosa revolución del Parque, la misma tuvo una proclama que contiene algunos párrafos que reproduzco a modo de iniciar una reflexión:

En cuatro años de gobierno se ha hecho millonario, y su fortuna acumulada por tan torpes medios se exhibe en bienes valiosísimos cuya adquisición se ha anunciado por la prensa. Su participación en los negocios administrativos es notoria, pública y confesada. Puede decirse que el ha vivido de los bienes del Estado y que se ha servido del erario público para constituirse un patrimonio propio.

En el orden público ha suprimido el sistema representativo hasta constituir un congreso unánime sin discrepancia de opiniones, en el que únicamente se discute el modo de caracterizar mejor la adhesión personal, la sumisión y la obediencia pasiva.

Sinceramente los males parecen permanecer vigentes, y así es por que el régimen con novedosas características y aggiornamientos, también lo está.

Funcionarios devenidos en millonarios, soberbia, corrupción, un panorama social desolador donde en la propia Ciudad de Buenos Aires, miles de argentinos pernoctan en el frío más extremo.

Estas fechas son propicias para repensar el radicalismo, y entenderlo como un proyecto colectivo de continuidad histórica, que somos parte de un larga camino, una travesía de 119 años no puede ceñirse a destinos o proyectos individuales es mucho más que eso.

Sólo en esta concepción el radicalismo puede nuevamente vigorizarse, entendiendo que ha atravesado persecuciones, derrotas, rechazo temporal del electorado, pero ha llegado hasta aquí para dar muestras que todavía tiene mucho para darle al país, como le dieron aquellos valerosos cívicos en los cantones en esos días de julio de hace 119 años.

Dr. Gustavo Aramburu
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