martes 19 de marzo de 2024 - Edición Nº3650

Política | 20 nov 2017

Opinión

De traiciones y traidores

El autor reflexiona sobre la flexibilización laboral del gobierno nacional que, prácticamente, retrotaerá los derechos a los primeros lustros del Siglo XX. La complicidad de la CGT y la incomprensible inacción de la ciudadanía, primera afectada.


Decía el Cardenal Richelieu: “La traición en política, es cuestión de tiempo”.

Los avances en los derechos laborales logrados durante algo más de cien años de lucha corren peligro. Las negociaciones entre la CGT y el gobierno nacional permanecen ocultas, aún no se han publicado ninguno de los acuerdos, lo cual tiene mal olor, ya que incita a pensar en traición por parte de los representantes de la masa trabajadora. Esa traición implicaría un retroceso a 1904 o antes, cuando el proyecto del primer Código de Trabajo del Gobierno del Gral. Roca y envió al Congreso fue rechazado, en donde se establecían derechos que hoy usufructuamos. Si es así, entonces pasaríamos a ser meramente vendedores esclavos de nuestra mano de obra.

La flexibilización implica eso: te uso un tiempo, te descarto y tomo a otro más barato, eso sería el trabajo de clase rotatoria. Puesto que no se aumentarían las vacantes, sino serían las mismas para un número creciente de desocupados a emplear en el mismo número de puestos de trabajo. También excluye a las horas extras, el pago de indemnizaciones, vacaciones etc. Si esto no es una regresión a la quasi esclavitud ¿qué es entonces? El primer rótulo que le cabe es traición por parte de la dirigencia de la CGT, que calladamente resignó derechos consagrados en muchos años de lucha de la clase trabajadora. ¿Pero a cambio de qué? ¿Recibirían algo por debajo de la mesa? Si es así, ¿no le sorprende que tales dirigentes era muy “machos” para pelear por el no pago de ganancias durante el gobierno anterior, cuando hoy pagan muchos más trabajadores? ¿No piensa Ud. ciudadano en que tendrá que trabajar más años y con una constante reducción de su haber jubilatorio? Todo eso por reducir la patronal sus aportes al ANSES. Pero para solucionar ese problema, el Gobierno Nacional tiene previsto la formación de AFJP, que ya las conocemos, que tampoco pagarían el 82 % del sueldo en actividad.

Sigamos sumando al desastre de la política actual: la suba de tarifas “a piacere” de las compañías privadas que son de carácter leonino, ya que ni siquiera permitirán tener resto suficiente para llegar a fin de mes. Todavía no se puede entender cómo es que los más necesitados votaron un sistema que los condenará a la desaparición y a depender de la caridad de sus hijos que estarán en las mismas apremiantes situaciones que los jubilados y pensionados.

Si todos tienen que poner algo, ¿me pueden decir qué es lo que pone el empresariado, los bancos, los fondos especulativos o golondrinas para sacar el país adelante? Despierte ciudadano, despierte, ¿o es que también a Ud. le han inyectado el odio a todo lo vivido durante el gobierno anterior?

Piense cómo estamos hoy: Estamos endeudados, no solo por los préstamos sino también por la fuga de capitales (que lo hacen los que están en el poder), con la desocupación en aumento, con la caída del consumo, el mercado interno herido de muerte, se regala el patrimonio nacional. Entonces, ¿qué soberanía tenemos si estamos endeudados y los préstamos están condicionados por quienes nos prestan? Se habla de “Todos Juntos”, será “ellos juntos”, el resto queda afuera. ¿Y qué hacer con los traidores que incluye a los representantes de la clase trabajadora y los que gobiernan? Estos últimos: A la Patria. En Francia cuando quisieron implementar esta reforma hubo 14 días de paro y todo se detuvo ¿Y nosotros qué?

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