“Las pandemias no son eternas, el teatro en algún punto lo es”

CIUDAD DE BUENOS AIRES (ANDigital) “El teatro es arte en tiempo real, no le es concebible otro soporte que no sea el escenario y la presencialidad. De hecho, si lo filmás y lo pasás por una pantalla deja de ser teatro, aunque puede que no deje de ser arte… pero habría que ponerle otro nombre y no se me ocurre cuál”.

Con esta declaración de principios, el escritor, ensayista y dramaturgo, Gustavo Andrés Rocco, se introduce al derrotero que decantó en Vistiendo sombras, su opera prima que con marcado suceso se presenta los viernes a las 22 horas en La Tertulia, con la actuación de Lucas Foresi.

“Esta obra la escribí durante el lapso más duro de la pandemia, cuando parecíamos estar en una ciudad de Europa del Este en los años 80; si uno se asomaba al exterior chocaba con la vigilancia del Estado, hecho en que me venía a la memoria el film La vida de los otros, sin que mi pensamiento soslaye la frase: ‘pobre gente aquella’. Fue un tiempo en que la gente fue obligada no sólo a toparse con la soledad sino a meterse dentro de ella. Cuando esto último ocurre, lo que le pasa a uno por dentro puede ser imprevisible porque -probablemente- en ese estadio nadie se conoce a sí mismo”, reflexiona en diálogo con ANDigital el autor de las novelas El señor de las catacumbas y Los hijos del dolmen.

Asimismo, advierte que “la hipercomunicación de la era moderna exacerba los estados de soledad, muestra permanentemente un mundo del afuera, interactivo por demás, en el cual el sujeto en dicho estado es un simple oyente que no participa, por lo tanto, el sentimiento de exclusión es más crudo”.

En cuanto al trabajo conjunto con el protagonista de la perturbadora Vistiendo sombras, Rocco pone de relieve que “con Lucas tuvimos una primera etapa que fue de exploración, donde él fue hacia sí mismo buscándose en las distintas facetas en que debía desdoblarse, dada la exigencia del texto”.

“Una vez logrado eso, hubo que pulir cada una de esas personalidades que integran la obra, algunas subirlas, otras bajarlas hasta encontrar la intensidad correcta, cosa que finalmente se pone a punto con la pasada del texto. Cuando él encontró y desarrolló esas características interpretativas ocultas en la obra, se trabajó fuerte y casi sin pausa, y de hecho nos adelantamos un mes a lo previsto”, completa.

Volviendo al “jaque” en el que la emergencia sanitaria por coronavirus puso al mundo del espectáculo y al teatro en particular, el especialista argentino en I Ching no duda en aseverar que “la pandemia lo puso en jaque, es cierto, pero no mate, el teatro es como un rey que siempre va a tener una puerta de escape”.

“Las pandemias no son eternas, el teatro en algún punto lo es, es además versátil, desde el saltimbanqui hasta un espacio como el Colón lo demuestran. Nuestro off, el porteño, es muy rico, digamos que lo estamos viviendo como un proceso de cambio de floración”, sentencia en torno a la avidez cultural imperante en nuestros días.

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Vistiendo sombras se presenta los viernes, a las 22 horas, en La Tertulia Espacio Teatral, calle Gallo 826.

Las localidades (a $ 1.200) pueden adquirirse vía Alternativa Teatral y en la boletería de la sala.-