viernes 02 de mayo de 2025 - Edición Nº4059

Policiales y Judiciales | 28 ago 2023

Delito

El fin del narco más buscado en Argentina: “Morenita” fue abatido a tiros en Corrientes

Federico Sebastián Marín era el narcotraficante más buscado del país desde febrero de 2023, cuando se escapó en una visita al médico. Lo hallaron, se resistió y ahora murió. Los detalles.


ITATÍ-CORRIENTES (ANDigital) Federico Sebastián Marín, conocido en el mundo del hampa como “Morenita”, fue abatido a tiros. Su apodo hacía alusión al pez pequeño, sumamente escurridizo, y que normalmente se utiliza como carnada; de allí sus habilidades para escapar del brazo de la ley, al punto que fue el narcotraficante más buscado del país desde febrero de 2023 momento en que, aprovechando que gozaba de arresto domiciliario, y aduciendo que padecía una enfermedad, camino a un hospital se dio a la fuga y desapareció todo rastro de su existencia, hasta ese domingo cuando fue abatido al enfrentarse a tiros con los investigadores federales.

Marín registraba un pedido de captura del Juzgado Federal de Morón junto con otros tres delincuentes, dispuestos por el Tribunal Oral en lo Criminal Federal Nº 3, el Tribunal Oral Federal de Tucumán y el Juzgado Federal Nº 2 de Corrientes, Secretaría Penal 1, todos vinculados a su actividad ilícita como narcotraficante, ramo en el cual no era muy querido.

En principio varias fuerzas federales y provinciales trataron de dar con “Morenita” sin obtener éxito en su cometido; por ello la Procuraduría de Narcocriminalidad (PROCUNAR), a cargo del Dr. Diego Alejo Iglesias; el Dr. Jorge Ernesto Rodríguez, titular del Juzgado Federal Nº 2 de Morón, y el Dr. Sebastián Basso, titular de la Fiscalía Federal de dicha ciudad, dieron intervención a la División Búsqueda de Prófugos de la Superintendencia de Investigaciones Federales de la Policía Federal Argentina, cuya misión es la búsqueda, localización y detención de prófugos, con carácter exclusivo y excluyente del accionar de otras reparticiones.

A partir de ese momento los detectives no menguaron esfuerzos, trasladándose en forma periódica a la localidad correntina de Itatí, donde habían logrado establecer el lugar de residencia de familiares del prófugo. A partir de allí llevaron adelante –siempre teniendo como guía el método científico– diversas medidas de investigación como ser: seguimientos de familiares; identificación de otros integrantes del entorno de “Morenita” que lo ayudaban a mantenerse prófugo; el montado de puestos de observación en zonas de monte de la costa correntina; intervenciones telefónicas y demás técnicas investigativas, hasta que finalmente los investigadores concluyeron que el fugitivo visitaba a sus familiares esporádicamente, pero que se encontraba guarecido en una isla del Río Paraná. Desde esa isla, el prófugo alternaba entre diversos domicilios del territorio argentino y paraguayo, tornando extremadamente difícil capturarlo.

Avanzada la investigación, y siempre contando con el apoyo de las autoridades judiciales, merced al accionar de los detectives de la División Búsqueda de Prófugos, encontrándose en la posibilidad cierta de localizar y detener al fugitivo, se constituyeron en Corrientes con el apoyo de una brigada operativa del Departamento Antisecuestros Sur, dependiente también de la Superintendencia de Investigaciones Federales.

De esta forma, mientras una parte de los agentes federales monitoreaban los movimientos de la familia del fugitivo, otra había montado un puesto de observación en el monte correntino pegado a una playa muelle de pescadores, específicamente en un espacio que “Morenita” usaba para ingresar a esa provincia del noreste argentino o reunirse con familiares.

De la sinergia producida por las operaciones policiales, se logró divisar a un sujeto que coincidía en apariencia del fugitivo, quien en el lugar esperado se subió rápidamente al automóvil familiar, sin que se lo pudiera identificar de modo indubitable, por lo que los agentes comenzaron a seguirlo.

Fruto de ello el fugitivo fue finalmente interceptado en la esquina de Fray Justo Juan de Gamarra y Los Benedictinos, en Itatí, momento en el que al verse cercado por el despliegue federal “Morenita” quizás en la idea de no entregarse ya que no era muy querido por sus compinches de causa, y a pesar de que estaba con su familia, arremetió a balazos contra los pesquisas, terminando el enfrentamiento con su muerte y con dos efectivos policiales con heridas de bala, quienes fueron asistidos encontrándose fuera de peligro tanto ellos como los familiares del buscado.

Al tratarse de un hecho acontecido fuera de jurisdicción, entiende en la investigación el Juez Federal de Corrientes Juan Carlos Vallejos, y por cuestiones procedimentales la Gendarmería Nacional, quienes secuestraron no solo el arma que Marín usó para repeler el accionar policial, una Bersa Thunder, si no también dentro del rodado en el que se movía con la familia una pistola calibre 9 milímetros marca Glock y otros tres revólveres, todos listo para usar. (ANDigital)

OPINÁ, DEJÁ TU COMENTARIO:
Más Noticias

NEWSLETTER

Suscríbase a nuestro boletín de noticias