

El abogado Marcelo Peña pretende modificar el Código Penal con el objetivo de legislar condenas con prisión efectiva para todas aquellas personas que radiquen falsas denuncias en contexto familiar para lograr objetivos personales en el fuero de familia, métodos que catalogó de “extorsivos”.
“Si bien las penas que proponemos son obviamente para ambos padres, el 90 % de las falsas denuncias son realizadas por mujeres que, por intereses económicos, patrimoniales y despecho, denuncian situaciones inexistentes que repercuten directamente contra la salud mental de los hijos. Intentamos modificar el Artículo 245 del Código Penal para que cuando surja inequívocamente una falsedad, en contexto de género y familia, se aplique una pena de entre 2 y 4 años”, explicó el letrado ante la Agencia Fueros.
De acuerdo a la visión de Peña, “pedimos esta pena de 2 a 4 años porque el Código Penal tiene la esencia de que delitos de esas características tengan también la posibilidad de que la primera pena que cumpla el progenitor en cuestión, sea condena de ejecución condicional. Hay otros delitos más graves que también permiten prisión en suspenso, con lo cual siempre debe existir la posibilidad de una pena menor a 3 años que es excarcelable. El caso es distinto en una reincidencia”.
“Intentamos que a través de este proyecto de Ley –que el abogado va a presentar–, haya un efecto disuasivo para que se sepa que a partir de ahora puede corresponderle una pena efectiva y no una suspensión de juicio a prueba. El que sentó precedente fue el caso Góngora que, en contextos de género y familia, se suspende esa posibilidad”, agregó.
Peña considera que hay casos “en el que por falsas denuncias se genera un agravamiento en las condiciones psicológicas del niño, allí no se puede ser contemplativos”, subrayó, e indicó que con esto se intenta proteger y ampliar los bienes jurídicos del niño, porque en muchos casos con una falsa denuncia se los somete a distintos procedimientos judiciales –como Cámara Gesell, terapias, revisaciones médicas– que son extremadamente invasivas y conllevan a una severa afectación psicológica en el menor”.
“Cuando el niño tiene 15 años, y tras 4 de no ver a sus padres, abuelos y tíos, se produce un quiebre psico-emocional difícil de remontar”, aseguró el letrado, quien agregó que defiende a varios padres en esta situación, denuncias falsas que muchas veces son recomendadas por abogados inescrupulosos que se aprovechan de la situación.
“La mentira y el absurdo de la exmujer de uno de mis defendidos llegó a tal punto que dijo haber visto a su hija que estaba siendo manoseada por el padre, y que en la misma habitación estaba sacando fotos una importante figura política. El hecho quedó descartado absolutamente, el padre sigue sin ver a su hija y la madre camina sin problemas. Muchas veces, aconsejadas por sus abogados, saben que las penas en caso que la investigación avance y se compruebe una falsa denuncia, son irrisorias”, sentenció el abogado.
Peña señaló que actualmente la falsa denuncia tiene una sanción penal muy liviana, de 2 meses a 1 año de prisión en suspenso, pero que de aprobarse su proyecto pasaría a ser de 2 a 4 años, y sin posibilidad de realizar una probation.
“Intentamos generar una modificación al Código Penal porque además del sufrimiento del padre o madre y del menor, son miles las horas que pierde el sistema judicial argentino en esta trama que muchas veces tiene un efecto desgarrador para los niños. Queremos que la falsa denuncia no sea una herramienta o instrumento para litigar en medio de una separación”, finalizó el profesional.