Se topó con “rompe-puertas” en su casa de La Plata, se les colgó del auto y terminó en coma

Un violentísimo episodio delictivo se vivió este lunes en La Plata donde un hombre que regresaba a su casa se topó con cuatro “rompe-puertas” y en la desesperación decidió correrlos y colgarse de la puerta de su auto, pero al arrancar lo hicieron volar por los aires y su estado de salud actual es gravísimo.

Todo sucedió pasadas las 13 horas en la calle 3, entre 34 y 35, pleno Barrio Norte de la capital bonaerense, y la secuencia –brutal, por cierto– fue registrada por una cámara de seguridad vecinal de la cuadra.

En las imágenes se observa la violencia de la caída de la humanidad de Martín Eduardo Scaray, el hombre de 34 años de edad víctima del terrible suceso, al impactar con parte de su espalda y cuello en el pavimento, tras volar por los aires.

📽| Desesperado por haber llegado a su casa y ver cómo un grupo de "rompepuertas" intentaba entrar, les gritó y se colgó del auto de los ladrones: cayó con dureza al pavimento y por poco no se mató. Fue hoy pasadas las 13 horas en 3 y 34, en #LaPlata. pic.twitter.com/N6FksPkciB

— ANDigital (@ANDigitalOK) July 22, 2024

Los vecinos salieron de sus viviendas al escuchar los desgarradores gritos de la madre de Scaray tras el hecho, e inmediatamente dieron aviso al 911 por lo que una patrulla de la Comisaría Segunda se hizo presente y decidieron trasladarlo al Hospital Rossi, donde se lo indujo al coma y quedó internado en observación de la evolución de los golpes recibidos.

El caso recayó en la UFI Nº 9 del Departamento Judicial La Plata, a cargo de la fiscal Mariana Ruffino, quien caratuló la causa como “robo en grado de tentativa” y ordenó el relevamiento de cámaras de la zona y testimonios con el fin de dar con los malvivientes.

De este grupo se sabe que se movilizaba en una camioneta Hyundai H1, de cuya ventanilla del lado de conductor se colgó la víctima previo a caer a la cinta asfáltica.

Vale remarcar que los delincuentes no pudieron robar nada de la casa de Scaray, aunque en el pasillo quedaron dos televisores, con lo cual queda claro que su arribo se produjo con el robo en pleno proceso.