

En las últimas horas se presentó un proyecto de ley en el Senado bonaerense a fin de brindar mayor protección a la fauna silvestre que fuera declarada Monumento Natural de la Provincia, ante las amenazas de la caza furtiva, mascotismo y/o captura y trafico.
Vale reseñar que nuestra Provincia posee un sistema de Áreas Naturales Protegidas (ANP) importante, en las cuales también conviven algunos monumentos naturales correspondientes a fauna silvestre.
El mencionado sistema de ANP, que engloba a las reservas, parques y refugios de vida silvestre, comprende una superficie de 1,5 millones de hectáreas, representando el 4,5 % del territorio bonaerense.
En este sentido, la ley provincial 10.907, que es la que regula a las áreas y monumentos naturales bonaerenses, en su artículo 11 establece que “podrá promoverse como tal, a las regiones, objetos o especies determinadas de flora y fauna de interés estético, valor histórico o científico. Los mismos gozaran de protección absoluta, siendo factible sobre ellos únicamente la realización de investigación científica debidamente autorizada y la práctica de inspecciones gubernamentales”.
“No podemos dejar de atender que parte de nuestra fauna silvestre en general y particularmente los considerados monumentos naturales, son víctimas de la caza furtiva o tráfico, a la vez que los actores de esta práctica ilegal -en la mayoría de los casos- no reciben sanciones o procesos judiciales, sólo administrativas como multas que se pueden aplicar desde al actual Ministerio de Ambiente”, expuso el senador del PRO Alex Campbell, autor de la iniciativa.
Así las cosas, indicó que “con esta propuesta podemos suministrar mayores herramientas a la justicia cuando interviene en distintos procedimientos”.
Los Monumentos Naturales que estarían comprendidos en esta propuesta legislativa para una mayor cobertura de protección, serían el Venado de las Pampas (zona Samborombón/General Madariaga); Ciervo de los Pantanos (zona delta); Cauquén Colorado (Necochea, San Cayetano); Lagartija de las Dunas (dunas costeras de Buenos Aires); Iguana de Cobre (especie endémica de la provincia) y Franciscana o Delfín del Plata (costas del Atlántico).
Entre los puntos salientes de su propuesta, Campebell explicó que “se establece la prohibición de la caza, recolección, tenencia, tránsito y/o comercialización de ejemplares vivos y/o muertos y/o de cualquier producto o subproducto de las especies declaradas monumentos, también prohibiendo su industrialización primaria o manufacturación de productos derivados de la especie, su consumo como así también la publicidad o cotización de productos o subproductos o despojos”.
“También se protege a toda actividad u obras a realizarse dentro del área de distribución actual o futura de los monumentos que pudiera modificar el sitio o provocar disturbios, en el que se deberá someter a la factibilidad técnica y científica al respecto y a las medidas de mitigación o compensación a implementarse”, cerró.
Por su parte, el ambientalista de la Región Capital, Marcelo Martínez, quien colaboró con la iniciativa, destacó su importancia “no sólo para la conservación y protección de especies de la fauna silvestre con alta vulnerabilidad que poseemos en nuestra Provincia, como es el caso de los monumentos naturales, sino también será una herramienta válida para la intervención de la justicia”.
Al respecto, puntualizó que “en la actualidad carecen de algunas especificaciones sobre estas especies y se dificulta en algunas oportunidades para aplicar sanciones judiciales en procedimientos que se realizan, más aun si tenemos en cuenta que tanto la caza furtiva, como el tráfico de animales silvestres están en los primeros lugares en el ranking delictivo”.