

Un violentísimo y fatal hecho ocurrió en las últimas horas en Berisso donde un efectivo de la Policía Bonaerense murió luego de haber sido atacado por un grupo de vecinos, en el marco de un operativo con el que se buscaba detener a un presunto delincuente que había intentado robar en una casa cercana.
El agente asesinado es el oficial Nicolás Chamorro, quien entre la noche de este jueves y la madrugada de este viernes recibió agresiones de vecinos cuando estaba arrestando al malviviente, pero uno en particular le asestó una patada por la espalda que le provocó la pérdida del equilibrio y una violenta caída al piso.
Tras convocar a personal policial de apoyo, los demás uniformados lograron identificar y detener al agresor –quien tras agredir al uniformado corrió e ingresó por uno de los pasillos del lugar, y fue otro de los vecinos el que informó el lugar dónde se escondía–, un sujeto de 28 años de edad y cuyas iniciales son JEA, quien acabó detenido en la Comisaría Segunda.
El agente, por su parte, en la propia dependencia manifestó sentirse mal, se desvaneció y se convocó al SAME, pero como demoró los propios camaradas decidieron trasladarlo en un móvil de inmediato al Hospital “Mario Larrain”, donde a pesar de recibir atención médica y de practicarle reiteradas maniobras de RCP, se terminó confirmando su deceso a la 1.55 de la madrugada de este viernes.
El caso es investigado por la UFI Nº 7 del Departamento Judicial La Plata, a cargo de la fiscal Virginia Bravo, quien caratuló la causa como “averiguación de causales de muerte” y ordenó que el sujeto detenido se mantenga en esa situación.
Vale remarcar que todo comenzó cuando personal de la mencionada Comisaría Segunda acudió a la manzana 9 del barrio Juan B. Justo, en Berisso, tras recibir una denuncia por un robo en proceso, y al llegar la denunciante les manifestó que un sujeto con ropa oscura había intentado ingresar a su vivienda, aunque no lo logró y se dio a la fuga.
Como de inmediato puso en práctica un operativo cerrojo, se observó al sospechoso en las calles 33 y 168, siempre de la ciudad lindera a La Plata, y cuando se intentó identificarlo comenzó a correr: de esa persecución es que se lo interceptó a los pocos metros pero casi en simultáneo los vecinos salieron a la calle y agredieron al agente, con las consecuencias que previamente se describieron.