

Una mujer fue brutalmente atacada por un delincuente adelante de su pequeño hijo cuando se dirigía a una feria a vender sus productos en Villa Celina: el ladrón la tironeó, la arrojó al piso y hasta le pegó una patada en la cabeza para robarle lo poco que llevaba consigo.
La execrable secuencia ocurrió en la intersección de las calles Aconcagua y La Quiaca de la mencionada localidad del partido de La Matanza, y todo fue captado por una cámara de seguridad.
En las imágenes se ve a la mujer caminando por una calle de tierra llevando unos cajones y un carrito, donde trasladaba mercadería pero también a su pequeño hijo, hasta que un sujeto la abordó e inmediatamente le pidió sus objetos de valor.
Como la mujer intentó resistirse, el delincuente se puso extremadamente violento y la golpeó con dureza, y todo para quitarle su teléfono celular.
🚔 #Inseguridad | Brutal robo a una mujer en Villa Celina: La golpearon y tiraron al piso adelante de su hijo
— ANDigital (@ANDigitalOK) February 21, 2025
📌 https://t.co/TQRRWbDHIf pic.twitter.com/QxqvcH62u4
Aparentemente este sujeto es un conocido malviviente de la zona, identificado por los vecinos, al tiempo que la mujer, de 32 años de edad y de nacionalidad boliviana, debió ser atendida por profesionales médicos tras recibir la violenta golpiza, que duró unos pocos segundos, aunque por suerte se encuentra en buen estado.
Marina, así se llama la víctima, relató que el sujeto “me estaba siguiendo, porque pasó por el frente y me pedía el celular. No me di cuenta. Me paré, vino y me agarró. Me empezó a golpear en la cabeza, me dio patadas. Mi nene estaba llorando”.
“Creo que tenía un arma, porque me dijo que si no lo soltaba me iba a dar cuchilladas. Mi nene estaba llorando, no sabía qué hacer y del susto me fui. Como me golpeaba en la cabeza me fui a buscar a mi pareja, que estaba llevando otras cosas también”, agregó, en declaraciones al canal TN.
La mujer dijo que aún siente dolores en el cuello y la cabeza, y que también tiene miedo de salir a la calle y que no sabe si va a poder volver a trabajar: “Tengo tres nenes. Traigo verdura y vendo eso, los martes y los jueves. No tengo otra cosa. No tengo trabajo seguro”.