

La Justicia confirmó este martes la prisión domiciliaria de Cristina Fernández de Kirchner en su departamento de Constitución, donde deberá cumplir la condena de seis años de arresto a raíz de la condena en la Causa Vialidad.
De esta manera, la expresidenta estará exenta de presentarse el miércoles en Comodoro Py para notificarse de su situación judicial.
El adelantamiento del arresto domiciliario es leído como una maniobra para desactivar la multitudinaria movilización convocada por el peronismo.
Entra las disposiciones, el Tribunal Oral en lo Criminal Federal 2 estableció que Cristina deberá utilizar tobillera electrónica para ser monitoreada.
También ordenó la presentación de una lista de ingresos, como así también “evitar comportamientos que puedan perturbar la tranquilidad del vecindario”.
Asimismo, cada tres meses se revisarán las condiciones de la detención.
A partir del despacho judicial, queda sin efecto el reclamo de la Fiscalía para que la expresidenta cumpla la sentencia en una cárcel común.