

La industria automotriz argentina continúa siendo una de las más relevantes en términos de empleo, producción e inversión, con una estimación de ventas de entre 440 mil y 470 mil unidades para este año. A nivel mundial, el sector emplea a más de 14 millones de personas, y en Argentina genera 73 mil puestos de trabajo directos: 25 mil en plantas ensambladoras y 48 mil en empresas autopartistas.
A pesar del crecimiento del sector, persisten dificultades estructurales vinculadas a la escasez de mano de obra calificada. La industria requiere perfiles técnicos con formación específica para operar tecnologías avanzadas, y enfrenta desafíos en retención de talento, inversión en formación y reconversión laboral.
“La industria automotriz está en plena evolución tecnológica, pero para sostener ese proceso necesita un ecosistema laboral preparado. Hoy el principal cuello de botella es la falta de talento calificado. Invertir en formación y trabajar sobre la empleabilidad es tan estratégico como incorporar nuevas tecnologías”, expresó Ariel Bonanno, KAM Automotriz y Metalúrgica de Adecco Argentina.
Según estudios recientes, el 76 % de los empleadores del sector tienen dificultades para encontrar los perfiles que necesitan, siendo los más críticos: ingenieros eléctricos, especialistas en automatización y robótica, programadores de software automotriz, analistas de datos y expertos en machine learning, diseñadores ux/ui, técnicos en mantenimiento de robots.
La tasa de rotación en el sector automotriz es más baja que el promedio nacional. En términos salariales, se ubica en una posición intermedia-alta: Tecnología ($ 1.200.000), Energía ($ 1.050.000), Automotriz ($ 850.000), entre otros. La fuerte sindicalización y la escasez de perfiles técnicos elevan los salarios.
Entre las principales innovaciones se destacan: electrificación de vehículos, automatización industrial, digitalización de procesos, inteligencia artificial aplicada y mayor foco en sustentabilidad.
Si bien hay avances en la producción de vehículos eléctricos, aún existen limitaciones en autonomía, infraestructura y escalabilidad. Argentina se mantiene como tercer productor automotor de la región, detrás de Brasil y México, con exportaciones que alcanzan el 46 % de su producción.