

El frente electoral Somos Buenos Aires, que apuesta a constituirse como una alternativa de centro en las elecciones provinciales, aún sigue limando asperezas mientras busca que el cierre de listas de este sábado complazca a todos los sectores.
La Unión Cívica Radical, con sus interminables internas, es la columna vertebral de la alianza, que también comprende al GEN de Margarita Stolbizer, a la Coalición Cívica de Elisa Carrió, el peronismo no kichnerista referenciado en Florencio Randazzo y Juan Schiaretti, y al espacio de Emilio Monzó.
Una de las tensiones del radicalismo se da por el malestar del sector que conduce el senador nacional Maximiliano Abad, quien inicialmente resistía el acuerdo de centro –en medio de una ola de rumores que lo postulaban a favor de un pacto con los libertarios–. Hasta último momento será una incógnita cómo juegue el abadismo y, en caso de hacerlo por la positiva, cuántos lugares obtendrá.
Otra perlita es la de Facundo Manes. A fines de mayo, el neurocientífico había lanzado su propio espacio, abandonando el partido centenario. Incluso su hermano Gastón Manes renunció a la presidencia de la Convención Nacional –el órgano que define las alianzas electorales–.
Pero como sostiene el refrán, la necesidad tiene cara de hereje. Dos meses después el destino y también el apremio de la coyuntura política lo hicieron recalcular y volvió a negociar con sus viejos conocidos.
En materia de nombres, la principal controversia gira en torno a las pretensiones correligionarias. Sus socios electorales denuncian que la UCR tensa el acuerdo al querer encabezar las nóminas en la mayoría de las secciones.
La gravitación del radicalismo en el interior bonaerense tiene su contrapeso en el Conurbano, donde los intendentes del peronismo moderado apuestan a hacer sentir su poder territorial.
En la Primera Sección el jefe comunal de Tigre, Julio Zamora, recientemente alineado a Manes y Schiaretti, es la figura más potable por estas horas para encabezar la lista de senadores.
En la Tercera Sección la carrera sigue abierta. El nombre del peronista Fernando Gray, alcalde de Esteban Echeverría, circuló con fuerza como prenda de negociación.
En tanto que en la órbita radical de esta sección se entusiasman con una postulación del actual diputado provincial Pablo Domenichini, oriundo de Monte Grande. quien responde a Martín Lousteau. Es uno de los dirigentes que encarna el co-gobierno del Comité Provincia, el mecanismo que encontró el radicalismo bonaerense para evitar la intervención partidaria.
En la Octava Sección dos nombres radicales suenan con fuerza. Uno es el del titular del radicalismo de La Plata, Pablo Nicoletti. El otro es Claudio Frangul, actual diputado provincial alineado a Manes.
En el resto de la Provincia el escenario varía de acuerdo a las particularidades de cada sección. Por ejemplo, en la Segunda el panorama es incierto, ya que el espacio de los Passaglia junto al intendente de Pergamino, Javier Martínez, se apresta a consolidarse como la tercera vía y representa un problema concreto para Somos Buenos Aires.
La Cuarta Sección exhibe ribetes atrapantes en términos de disputa política. Es una zona geográfica donde el radicalismo está consolidado con la figura de Miguel Fernández –titular del Comité Provincia y ex intendente de Trenque Lauquen–, pero a eso hay que sumarle que también es el territorio de Emilio Monzó –oriundo de Carlos Tejedor–.
Otro actor de fuste en la coyuntura es el intendente de Chivilcoy, Guillermo Britos, quien apostará a hacer valer sus credenciales en la lista de candidatos a senadores.
Por si esto fuera poco, el posible arribo de Pablo Petrecca, intendente de Junín, agregaría más condimentos a una disputa con final incierto en una sección evidentemente discutida.
En la Quinta Sección el nombre elegido para liderar las listas sería el del histórico intendente de Tandil, Miguel Lunghi.
La Coalición Cívica se impondría en la Sexta Sección, con el nombre del exsenador bahiense Andrés De Leo como posible cabeza de lista.
Y por último en la nómina de la Séptima Sección no se descarta que juegue el jefe comunal de Saladillo, José Luis Salomón.