

En la sala Cunill Cabanellas del Teatro San Martín (Avenida Corrientes 1530) se presenta La piedra oscura, una pieza del dramaturgo español Alberto Conejero que pondrá en escena el director Alejandro Giles con un elenco integrado por Martín Urbaneja, Iván Hochman y Milagros Almeida.
La obra narra el encuentro entre dos hombres que no se conocen y que, en una habitación de un hospital militar, comparten las horas terribles de una cuenta regresiva que, quizás, termine al amanecer con la muerte de uno de ellos. Hay un secreto envuelto en remordimientos y un nombre que resuena en las paredes: Federico.
“Esta obra está inspirada libremente en la figura de Rafael Rodríguez Rapún, estudiante de minas, secretario del teatro universitario La Barraca y compañero de Federico García Lorca en los últimos años de sus vidas”, puntualiza Alberto Conejero, una de las voces más interesantes de la dramaturgia española en la actualidad, autor de esta pieza que se estrena en Buenos Aires.
“Rapún murió un 18 de agosto de 1937 –justo un año después de Federico– en un Hospital Militar de Santander. Le habían herido antes en el transcurso de un ataque aéreo cerca de Bárcena de Pie de Concha. Por lo tanto, el encuentro del que se ocupa mi obra es ficción. Sin embargo, el resto de informaciones, datos, nombres, sucesos, son el resultado de la investigación que desarrollé durante los últimos años”, completa.
La piedra oscura era asimismo el título, y prácticamente lo único que queda, de la obra que Lorca estaba apenas empezando cuando fue asesinado en 1936. Además de que en ella pensaba tratar el tema del amor homosexual, poco se sabe de este texto condenado a perderse en todos los sentidos.
Desde este punto de vista, la pieza de Alberto Conejero —autor que empezó a ser reconocido a partir de Clift (Acantilado) en 2010—, plantea desde su título una recuperación de aquello malogrado por un pasado arbitrario y criminal. Y reflexiona sobre la memoria como espacio de justicia y la necesidad de redención.
“Hay una relación que se forja en la intemperie y la hostilidad de la guerra”, manifiesta Alejandro Giles, director de esta versión de La piedra oscura.
Además, recalca: “Hermanos enfrentados con hermanos. Y la imagen, la inspiración, la poesía de García Lorca que, en palabras de Rafael, van dándole sentido a esta historia. Invadidos por la omnipresencia de Federico, que los acerca y los aleja permanentemente, la hora de la muerte se acerca y las utopías hacen crecer el sentimiento y el deseo”.
La música original y el diseño sonoro de este montaje fueron compuestos por Brian Arévalo, el diseño de iluminación es de Félix “Chango” Monti y Magdalena Ripa Alsina, y el diseño de escenografía y vestuario de Julio Suárez.
Las funciones serán de miércoles a domingos a las 19.30 horas (hasta el 31 de agosto), con entradas a $ 17.000 (miércoles a $ 10.000).