

A días de celebrarse el Día del Niño, Argentinos por la Educación realizó un análisis de las respuestas de los alumnos de 3° y 6° grado de primaria a los cuestionarios de las Pruebas Aprender 2024 y 2023, respectivamente. El objetivo fue conocer sus respuestas sobre las actividades que realizan en su tiempo libre.
Los datos informados por los estudiantes muestran que el 89 % de los alumnos de 6° grado utilizan redes sociales en su tiempo libre. Además, el 87 % dijo que mira series, películas o videos, el 68 % juega de forma digital y el 40 % crea contenidos para redes sociales.
A pesar del tiempo que dedican a las pantallas y a la tecnología, un 85 % aseguró que realiza actividades artísticas, deportivas, físicas o juegos al aire libre. También, el 81 % expresó que se reúne con amigos y amigas.
Por otro lado, sólo el 35 % estudia idiomas, y el 46 % lee libros fuera del ámbito escolar. En comparación con los datos de 2018, esos porcentajes eran de 37 % y 61 %, respectivamente, evidenciando una disminución en 2023 en estas actividades.
En el caso de los alumnos de 3° grado, el 91 % indicó que mira dibujitos, series y películas, el 80 % juega al aire libre, el 42 % lee cómics y entre un 22 % y un 26 % participa en talleres o clases de baile, arte o música.
“Los estudiantes de los grados 3º a 6º tienen entre 8 y 11 años, una edad especialmente potente para la interacción social, la inclusión en actividades de equipo, la identificación de habilidades y gustos personales en los cuales desarrollar maestría”, contextualizó Irene Kit, presidenta de la Asociación Civil Educación para Todos.
De todos modos, indicó que “el incremento del acceso a contenidos y recursos digitales por parte de la infancia, se vive como un hecho ineludible, y a veces con una valoración de época. Pocas veces ese acceso se alcanza a corresponder con una adecuada supervisión parental, aun cuando a edades cada vez más tempranas se accede a esos recursos, tan potentes como riesgosos para el desarrollo y la salud integral de los niños y niñas”.
Estos datos reflejan las tendencias y cambios en las actividades que los chicos hacen en su tiempo libre, en un contexto donde la tecnología tiene un papel preponderante, pero aún prevalecen actividades tradicionales y sociales.
Por su parte, Inés Zerboni, licenciada en Psicopedagogía, Directora en Proyecto E, considera que “el tiempo libre de los niños es mucho más que un momento para descansar: es un espacio clave para su desarrollo emocional, social y creativo”.
“El informe muestra que hoy, el mayor porcentaje de los alumnos en ese tiempo usa pantallas. La tecnología es parte del mundo actual, pero su uso excesivo limita experiencias esenciales: jugar, moverse, crear y compartir”, anexó la profesional.
Y sentenció: “Los niños necesitan aburrirse para inventar, correr para liberar energía y estar con otros para aprender a convivir. Somos los adultos quienes debemos ofrecerles alternativas que los enriquezcan: un deporte, una actividad artística, un encuentro con amigos, un rato en contacto con la naturaleza”.