

El presidente de la Nación, Javier Milei, se refirió por primera vez al escándalo de las coimas en su Gobierno y lo inscribió en un contexto de “burdas acusaciones difamadoras”, que refleja “de manera fidedigna el comportamiento de la casta en una nueva embestida por frenar el proceso de cambio que el país está atravesando”.
“Cuando nos metimos a la política sabíamos que esto iba a ser difícil porque la casta está enquistada en el Estado hace décadas y va a hacer lo que sea por defender sus privilegios. Sabíamos que los poderosos no se iban a rendir y junto al Círculo Rojo se dedicarán a difamarnos, calumniarnos e injuriarnos”, exclamó el mandatario en el evento anual organizado por el Consejo Interamericano de Comercio y Producción (CICyP) en el Hotel Alvear de Buenos Aires.
Acto seguido, evaluó que “la opereta de esta semana no es más que otro ítem en la larga lista de artilugios de la casta y, tal como todas las anteriores, una nueva mentira”.
“Dependerá de la Justicia esclarecerlo; nosotros nos encontramos a su disposición y esperamos que todo se aclare tan pronto como sea posible”, acotó el líder libertario.
#Coimas 🗣️ Tras una semana de silencio, Milei negó las coimas: “Opereta”
— ANDigital (@ANDigitalOK) August 28, 2025
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En igual tesitura, reflexionó: “Ni la gente mastica vidrio ni nos vamos a dejar amedrentar con estas acciones cobardes. En todo caso nos envalentonan porque demuestran que están desesperados”.
“Nuestro sendero es claro, pero la velocidad en la que lo transitamos depende de los obstáculos que se presenten en el camino”, sumó Milei.
Luego juzgó que “saben que nuestro plan de Gobierno está funcionando, y por eso somos testigos de ruidos que se ven amplificados por las elecciones” y “el 7 de septiembre los bonaerenses le van a poner fin al régimen de mentiras, violencia, corrupción y extorsión del kirchnerismo”.
“Tenemos un Congreso secuestrado por lo peor de la clase política argentina que, temerosa de que terminemos con su negocio, quiere llevarse puesto al Gobierno nacional elegido por el 56 % de los argentinos yendo contra nuestro superávit fiscal, que es la piedra angular del proyecto nacional que hará a la Argentina grande nuevamente”, prosiguió.
Así las cosas, advirtió que “no pensamos retroceder ni un milímetro en el camino que ya transitamos. Tenemos claro que este proceso no fue para nada fácil para los argentinos y no vamos a tirar por la borda todo su esfuerzo”.
“Venimos de décadas de un desastre económico que dejó a nuestra sociedad pobre y estancada. La única forma de cambiar el país de forma definitiva es comprometiéndonos a ir a fondo con las reformas que faltan”, recalcó.
Al aludir al ataque a la caravana que encabezó este miércoles en Lomas de Zamora, dijo que “vivimos una situación aberrante. Un grupo violento irrumpió por la fuerza y empezó a arrojar piedras hacia nosotros. Y como todos también saben, esto se dio en medio de un contexto de burdas operaciones difamadoras”.
“Era muy emocionante enfrentar toda la lluvia de piedras con el profe Espert y mi hermana y alguno de los candidatos de la tercera sección; era un espectáculo increíble. Se veía la desesperación”, se jactó.
Y remató: “Hoy más que nunca tenemos que ir a votar para evitarlo. Esta es la base sobre la cual seguir creciendo. Y el camino seguirá siendo el mismo que nos trazamos desde el primer momento: achicar el gasto total, achicar al Estado y, por ende, devolverle la libertad al sector privado”.