Este mediodía, el presidente Javier Milei dio el puntapié inicial a una nueva edición de la Feria Internacional de Turismo de América Latina (FIT) en el predio de La Rural, en Buenos Aires, y aprovechó la ocasión para marcar agenda sobre su plan de reformas.
Tras su reciente gira por Estados Unidos, Milei volvió a poner el foco en la economía y los cambios estructurales que propone. “Cuando asumimos, el país estaba al borde de una nueva hiperinflación y con indicadores sociales alarmantes. Teníamos que actuar rápido y con decisión”, afirmó durante su discurso.
El mandatario resaltó los logros de su gestión en los primeros meses: destacó la reducción del déficit fiscal, el superávit del Banco Central y la posición única de Argentina en el mundo por mantener finanzas públicas equilibradas sin caer en default. “Nunca en los últimos 125 años habíamos logrado algo así”, sostuvo.
En paralelo, insistió en que su Gobierno apunta a reformas profundas: “Necesitamos un mercado laboral más flexible, un sistema impositivo más simple y menos impuestos, y terminar con la industria del juicio que tanto daño hace”, remarcó Milei. Además, insistió en que la estabilidad económica es clave para atraer inversiones a largo plazo.
Al hablar del sector turístico, consideró que el país tiene “destinos que despiertan envidia a nivel mundial, gastronomía reconocida y un capital humano de primer nivel”. Según Milei, con políticas correctas, Argentina puede posicionarse como un líder global en turismo y desarrollo económico sostenido.
El presidente cerró su intervención insistiendo en que no se puede volver a políticas devaluatorias ni a financiar el gasto con emisión descontrolada. “No es una cuestión de capricho, sino de disciplina fiscal. Con orden y menos regulaciones, podemos aspirar a ser un país próspero”, concluyó.