

El expresidente de la Nación, Alberto Fernández, volvió a referirse a la causa en su contra por violencia de género iniciada por Fabiola Yañez, negando tajantemente las acusaciones.
Entrevistado en el canal de streaming de la licenciada Roxana Kreimer, el dirigente peronista deslizó que “alguien indujo” a Yañez a declarar en su contra.
“En una llamada telefónica ella me dice: ‘Si no hago la denuncia, ¿qué gano yo? Porque si hago el documental me van a pagar equis millones de dólares. Yo quiero garantizarme mi futuro y el futuro de mi hijo’”, recapituló Fernández.
Acto seguido, afirmó que “en los chats desde el momento en que ella no hace la denuncia hasta que la hace, sus planteos eran ‘Vení a Madrid y arreglemos esto personalmente’. Lo que ella quería era un departamento y recursos que yo no tengo. Ese fue el determinante que la llevó a accionar de esta manera, sin medir las consecuencias”.
“El juez ha actuado de modo tan escandaloso que la única prueba que tiene es el testimonio de Fabiola Yañez, amparada, en alguna medida, por su madre. Se niega a recibir los testimonios de los empleados de la Quinta de Olivos”, disparó el exmandatario al aludir al magistrado federal Julián Ercolini.
Por otra parte, manifestó que “las amigas de Fabiola han declarado y han dicho que los golpes eran producto de sus caídas porque bebía alcohol, y que se sacaba fotos para después usarlas en mi contra. Nada de eso fue valorado por el juez Ercolini”.
En igual tenor, arremetió contra la esteticista de Yañez, a quien denunció por “falso testimonio” respecto de las lesiones. Y lo justificó: “Reconoció que había estado el 19 de julio haciéndole un tratamiento de plasma enriquecido en plaquetas a Fabiola, lo que verdaderamente le causó un daño en el ojo”.