

El directivo de la Cámara de Industriales Panaderos de la provincia de Buenos Aires (CIPAN), Martín Pinto, se refirió al complejo momento que sufren las panaderías, que se agrava no sólo por la crisis económica, sino también por el aumento desmedido en los alquileres de los locales, razón por la cual ya cerraron más de 1.700 locales en todo el país.
Según resaltó el referente sectorial, la industria estaba protegida por la Ley de Alquileres en el Gobierno de Alberto Fernández, porque la renta de los locales se renovaba cada seis u ocho meses y los propietarios no tenían la potestad de poner el precio en dólares.
“En este momento está todo permitido. El alquiler lo cobran en dólares, efectivo. Hay que ir a cambiar los pesos por dólares a un lugar y al dueño de la propiedad llevarle dólares. Antes era cada seis meses, y ahora es cada dos meses o cada mes si el dueño así lo decide. Por esto cerraron panaderías”, describió Pinto en declaraciones a la AM 750.
En igual tenor, puntualizó que “veníamos cacheteados desde fines del 2023, pero ahora se agravó muchísimo desde diciembre para acá, porque nos dieron esa sorpresa”.
“En total tenemos 1.750 panaderías que cerraron en todo el país, con el agravante de que en la provincia de Buenos Aires tenemos casi 700 panaderías, que es donde se nuclea la parte dura de los panaderos”, acotó.
Para Pinto, el aumento de los alquileres en dólares, más la derogación de la Ley de Alquileres y la crisis económica en la que el peso se devalúa día tras días, hace que los trabajadores de la industria sufran y tengan que cerrar sus negocios.
“La semana pasada, cuando hicieron la estafa de las retenciones, para que se sigan llenando de plata los grandes empresarios, la harina aumentó un 12 % más IVA y en otros casos un 16 % más IVA, cuando ellos dicen que la inflación fue del 1,5 %. No coincide la realidad de fantasía que plantean con lo que viven los argentinos”, concluyó el directivo de CIPAN.