En las últimas horas se conoció la lamentable noticia del hallazgo del cuerpo sin vida de Débora Damaris Bulacio del Valle, de quien nada se sabía desde el sábado por la noche cuando el sereno de un camping en Necochea la vio abrazada a su pareja.
Su pareja es Ángel Gutiérrez, un hombre de 32 años de edad que se encuentra detenido desde el domingo por la mañana cuando intentaba dejar la ciudad balnearia, y luego de que a la propia gente del camping le llamara la atención que intentara salir del predio en soledad, cuando había llegado con su pareja.
Ambos, tanto Gutiérrez como Bulacio, habían llegado a esta ciudad desde Villa Cacique-Barker, localidad del partido de Benito Juárez, distante unos 140 kilómetros de Necochea.

A partir de esta situación, más de 80 efectivos policiales, junto con equipos de búsqueda y perros rastreadores, iniciaron un operativo de búsqueda el domingo, primero en el camping donde se alojaba la pareja, y luego extendido hacia sectores cercanos del Parque Miguel Lillo y la zona costera.
Este martes pasado el mediodía fue hallado el cuerpo en el predio del Lago de los Cisnes, según trascendió estaba semienterrado en la tierra aledaña, a pocos metros de la calle de acceso principal.
Al lugar arribó el equipo forense de la Policía Científica para realizar las pericias sobre el cuerpo y el área del horroroso hallazgo.

Vale decir que previamente se habían hallado prendas de vestir con manchas de sangre, que pertenecerían a Débora, y luego se conoció un video captado por una cámara de seguridad en el que se veía a Gutiérrez transportando lo que se cree sería el cuerpo de la mujer asesinada.
El caso es investigado por el fiscal Walter Pierrestegui, quien a estas alturas evalúa modificar la carátula de la causa e imputarle a Gutiérrez el delito de “femicidio”, cuya pena en expectativa es de reclusión perpetua.
Es importante resaltar que Débora tenía tres hijos, una joven de 28 que estudiaba en La Plata, otra de 21 y un chico de 14.