Policiales y Judiciales | 25 sep 2014
Infructuoso accionar
Berni reveló que tocó “varios timbres en juzgados” para que detengan al motochorro mediático
El secretario de Seguridad de la Nación se quejó de que Gastón Aguirre “camina por los estudios de televisión como si fuera un rock star. Dijo que “lo peor” es que “hay una pistola que está dispuesta a seguir cometiendo delitos, que en cualquier momento puede ser disparada y provocar la muerte de alguien”.
CAPITAL FEDERAL (ANDigital) El secretario de Seguridad de la Nación, Sergio Berni, dijo haber tocado “varios timbres en juzgados” en pos de conseguir “una orden de detención” contra Gastón Aguirre, el joven que fue filmado asaltando a un turista canadiense en el barrio porteño de La Boca, pero resaltó que su pedido fue infructuoso “por complicidad, inoperancia, imprudencia o negligencia”.
“La persona que sale a la calle a robar con un arma está dispuesta a matar”, advirtió el funcionario, quien pidió que “después no nos quejemos” si Aguirre “provoca la muerte de alguien”.
Entrevistado por Radio La Red, se quejó de que Aguirre “camina por los estudios de televisión como si fuera un ‘rock star’ y lo que es peor: hay una pistola que está dispuesta a seguir cometiendo delitos, que en cualquier momento puede ser disparada y provocar la muerte de alguien”.
“No hubo una persona en la Justicia que me diera una orden de detención. Toqué varios timbres en juzgados. Él mismo se autoincriminó, tiene un arma. Todavía no pude lograr una orden de detención, es increíble. Después no nos quejemos”, insistió el secretario de Seguridad.
Consultado sobre por qué considera que ningún juez libró una orden de detención contra Aguirre, respondió: “No sé si por complicidad, inoperancia, imprudencia o negligencia”.
“Lo concreto es que esa persona hoy está en la calle. Es una persona que estuvo robando con un arma y amenazando gente en la calle”, prosiguió.
Finalmente, en alusión a los jueces y fiscales, indicó que “deben comprometerse en generar mejores políticas de seguridad” y lamentó que “miran esto como si a ellos no les tocara y las consecuencias lógicas son éstas: un delincuente más que está suelto por la calle”. (ANDigital)