Grave denuncia por maltratos y tormentos a abuelos internados en un geriátrico de La Plata

LA PLATA-BUENOS AIRES (ANDigital) El hijo de una mujer de 99 años de edad denunció penalmente a un geriátrico ubicado en pleno centro de La Plata por maltratos y tormentos que sufrieron algunas de las personas allí alojadas, y además de ello dejó evidencias de falta de higiene y la ausencia total de medidas de bioseguridad en el lugar.

Gerardo Domenech radicó su denuncia ante la UFI Nº 6 del Departamento Judicial La Plata, a cargo del fiscal Marcelo Romero, sobre el geriátrico “Emmanuhel”, emplazado en calle 4, entre 42 y 43 de la capital bonaerense donde, según relató, su madre sufrió maltratos físicos y tormentos psicológicos.

El 19 de marzo de 2021 a las 10:45 horas el hijo de la víctima y denunciante recibió un llamado telefónico de la directora del geriátrico diciéndole que su madre se encontraba muy decaída por efectos de una medicación para dormir que ella misma le había suministrado.

El denunciante indicó que le dieron la misma sin ninguna autorización ya que su médico de cabecera jamás le prescribió medicamentos de ese tipo.

“La directora también me manifestó que mi madre de 99 años había sido atada a la cama durante toda la noche. Mi madre no sufre ningún tipo de demencia que incite a aplicar semejante procedimiento y está en perfecta consciencia de lo sucedido”, agregó Domenech.

Tras lo sucedido el hombre decidió retirar a su madre en forma definitiva del establecimiento, acción que llevó a cabo con dos testigos: “Encontramos a mi madre en un estado deplorable, con evidentes efectos de narcóticos y moretones, lastimaduras en las muñecas y otras lesiones”, indicó, e inmediatamente denunciaron el hecho en la Comisaría Segunda de La Plata.

Si bien le nonagenaria mujer fue retirada del establecimiento con lesiones, en el lugar aún hay abuelos internados.

El denunciante dijo que observó pésimas condiciones de higiene, remarcó que los residentes permanecen en un ambiente cerrado y los trabajadores cumplen sus tareas sin barbijos, poniendo en peligro al grupo de riesgo que constituyen los abuelos.

Tampoco se respetan las medidas de seguridad ya que no hay matafuegos a la vista, luces de emergencia ni salidas alternativas, y el lugar tiene apenas una sola puerta de entrada y salida.

“No se le aplica alcohol ni se les toma la temperatura a los visitantes. La directora me emitió un recibo de puño y letra sin constancia fiscal alguna a pesar de que le solicité en reiteradas ocasiones el recibo oficial”, resaltó Domenech.

Las irregularidades continúan y la causa no avanzó lo suficiente, mientras tanto otros abuelos siguen en absoluto riesgo. (ANDigital)