“Te estás buscando un par de puñaladas”: Un femicidio evitable en La Plata

El pasado miércoles Liliana Alegres, de 43 años de edad, fue asesinada a golpes y puñaladas por su pareja, Fabio “Pachi” Ortiz, de 31, en una vivienda de las calles 143 y 34 en La Plata, y el femicida fue detenido tras pasar dos días prófugo.

Si bien la investigación por el crimen avanza a paso firme, ANDigital reveló que 20 días antes de ese trágico hecho las autoridades habían tomado conocimiento de que existían amenazas y golpes previos del criminal hacia Alegres: “Te estás buscando un par de puñaladas”, le dijo el ahora detenido a la víctima el pasado 20 de julio.

La denuncia por ataques y amenazas previas fue radicada por la expareja de Alegres, un hombre con quien tuvo tres hijos: su declaración data del pasado 23 de julio y ANDigital accedió a la pieza judicial.

En ese documento el denunciante agrega que la víctima no solo sufría golpes y amenazas por parte de Ortiz, sino que también era sometida a diversos castigos, e incluso se especificó que en una oportunidad le produjo quemaduras en la piel: “Varias veces la vi herida en el rostro”, manifestó el exesposo de Alegres.

Una fuente abocada a este caso contó un insólito episodio que explica el pésimo accionar de las autoridades: “Días antes del crimen, Alegres fue revisada por médicos quienes constataron lesiones compatibles con hechos de violencia de género, estando al lado el agresor los policías le preguntaron si quería instar la acción penal. Era obvio que ella estaba amenazada y por eso les dijo que no; lo hizo por miedo”, agregó la fuente consultada por ANDigital.

A otra fiscalía

Tras el arresto de Ortiz por el asesinato, el imputado se negó a declarar. Este medio también acreditó que el expediente por el femicidio de Alegres ya no se tramita en la UFI Nº 2 del Departamento Judicial La Plata, ya que debido al contexto en el que se dio la fiscal Betina Lacki decidió girar el caso a la UFI Nº 13, especializada en casos de violencia de género y a cargo de la fiscal Mariana Ruffino.

En ese marco, la familia de Alegres designó un abogado particular, y quien tomó el patrocinio del particular damnificado es el abogado Alexis Bulus.

En declaraciones a ANDigital, el penalista sumó más datos de interés: “A los pedidos de auxilio y a las denuncias previas se suma un llamado a la línea 144 (de carácter nacional), este femicidio se pudo evitar y las autoridades fallaron. Vamos a pedir que se investigue a la hermana del detenido y a parte de su entorno porque creemos que pudo haber cómplices o facilitadores”, indicó.

En esa línea, Bulus refirió que “la víctima no tenía su teléfono celular porque Ortiz y sus allegados se encargaron de mantenerla incomunicada y de controlarla de manera constante”.

Cabe señalar que Ortiz no solo enfrenta los graves cargos por perpetrar el femicidio, sino que además tiene antecedentes penales.

El prontuario

Uno de los investigadores relató a ANDigital que Ortiz era una persona “violenta y peligrosa”. Para sostener esto se anexó a la causa penal una investigación por “lesiones, abuso de armas y portación ilegal de arma de guerra”, imputación que se hizo en el año 2016 tras un hecho perpetrado en la ciudad bonaerense de Arrecifes.

También se sumó una imputación por “infracción a la ley de estupefacientes (Nº 23.737)”, en esa causa tiene intervención el Juzgado Federal Nº 4 de Rosario, en la provincia de Sana Fe.

Ante este frondoso historial, y con las denuncias por violencia de género y abusos en la mano, a nadie pareció haberle interesado, y hoy lamentamos un femicidio, otro más en la triste historia argentina.