Policiales y Judiciales | 21 ago 2024
Pedofilia
El Padre Grassi quiere que lo liberen ahora, aunque su condena concluye en 2028
El extitular de la Fundación “Felices los Niños” pidió una audiencia en tal sentido. Como estudió abogacía, es su propio representante letrado. Los detalles.
El padre Julio César Grassi, condenado a 15 años de prisión por abusar a dos menores, pretende una liberación anticipada y este jueves habrá una audiencia clave en el Tribunal Oral Criminal Nº 1 del Departamento Judicial Morón para analizar la pertinencia de ese beneficio.
Grassi pasa sus días en una cárcel de la ciudad bonaerense de Campana y cumplirá su condena en mayo de 2028; sin embargo, este 22 de agosto participará de una audiencia por videollamada con los magistrados del tribunal.
El sacerdote fue imputado por el abuso sexual de dos menores en el año 1996 y recién en el 2009 fue condenado en un juicio oral y público a 15 años de prisión, y en 2017 la Corte Suprema de Justicia ratificó la pena y la dejó firme.
Grassi, en la Unidad Nº 41 de Campana, se recibió de abogado y, como oficia de su propio representante letrado, ahora pide salir antes de la prisión.
El abogado Juan Pablo Gallego, representante de las víctimas del sacerdote abusador, habló con la agencia Noticias Argentinas sobre dicha posibilidad y se mostró preocupado, aunque asegura que tiene los elementos necesarios para evitar que se le otorgue el beneficio de la libertad condicional.
“Voy a exponer y alegar los motivos por los cuales Grassi no puede salir. En primer lugar, porque el propio Código Penal establece que no es un beneficio que puedan pedir los delincuentes sexuales; por otro lado, el acusado hizo ese pedido por escrito y el tribunal de alguna manera abrió el incidente a prueba, se le pidió una pericia psicológica a la cual él se opuso y, por último, hubo mucho cabildeo con el informe carcelario”, detalló Gallego.
Sin embargo, el letrado sostuvo que Grassi es “un poderoso” que siempre “aprovecha” algún momento de “distracción” para que le otorguen beneficios.
En el juicio se comprobó que Grassi atacó en 1996 a dos menores en la Fundación “Felices los Niños”, la cual había fundado años atrás y que él mismo administraba.