Policiales y Judiciales | 27 sep 2024
Execrable
Cayó en Hurlingham un anciano prófugo que había abusado de sus nietas
El sujeto tiene 77 años de edad. Era buscado por la Justicia desde el 2018, años desde el que se emitió un pedido de captura nacional. Los detalles.
En las últimas horas cayó en Hurlingham un abuelo que se mantenía prófugo de la Justicia y que está acusado de haber abusado de sus propias nietas, ambas menores de edad.
Sobre el sujeto pesaba un pedido de captura nacional emitido por la UFI Nº 11 del Departamento Judicial Morón, a cargo de la fiscal Marina Rueda, solicitó su captura a la División Ciberpatrullaje de la Policía Federal Argentina, para que ubicaran el paradero del individuo de quien nada se sabía desde el año 2018.
La denuncia había sido radicada por la madre de las víctimas en el 2017, lo cual motivó el inicio de un expediente judicial y una decisión extrema del ahora detenido: se disparó en la cabeza, pero no logró su cometido de suicidarse porque fue derivado al Hospital Posadas, donde lograron salvarle la vida.
Sin embargo, una vez lograda el alta nunca regresó a su casa, en un hecho que debería prever una investigación a fondo sobre las autoridades encargadas de su custodia, y a partir de ese momento se convirtió en prófugo.
Hasta las últimas horas en que el personal de la PFA, fuerza dependiente del Ministerio de Seguridad nacional, pudo identificar dónde se hallaba oculto, en una vivienda ubicada sobre la calle Benvenuto Cellini al 4300 de la localidad de Villa Tesei, en el mencionado distrito de la zona oeste del Conurbano bonaerense.
Tras intensas tareas de campo, operaciones de encubierto y vigilancia, y análisis de redes sociales, los agentes federales comprobaron que se trataba del sujeto buscado y lograron detenerlo, una vez reunidas las pruebas necesarias y tras la orden de allanamiento de la Dra. Laura Mariel Pinto, a cargo del Juzgado de Garantías Nº 1 del Departamento Judicial de Morón.
Este hombre argentino, recordemos de 77 años de edad, quedó a disposición de la Justicia bajo una carátula de “abuso sexual con acceso carnal calificado”, al ser el autor ascendente y encargado de la guarda, reiterado en al menos cinco oportunidades y durante tres años. Una verdadera lacra humana.