Autocrítica albertista: “La mayor subestimación nuestra fue la baja de la inflación”

La exministra de Trabajo de la Nación, Raquel ‘Kelly’ Olmos, reconoció que la gestión de Alberto Fernández subestimó el impacto de la inflación en los trabajadores informales, aunque cuestionó a la actual administración de Javier Milei por el gravoso impacto del ajuste.

“Desde el punto de vista de las políticas, por más que intentan expresarse como algo nuevo, este Gobierno es la reiteración con más intensidad del neoliberalismo”, enfatizó la dirigente peronista.

“Porque las políticas son siempre las mismas: destrucción de los derechos laborales, que viene acompañada de un debilitamiento de las organizaciones gremiales, que son las que tienen la responsabilidad de sostener. Disciplinamiento y destrucción masiva. Porque el mecanismo es que, si exigís más derechos, tenés desocupación”, enumeró.

Acto seguido, consignó que “cada vez que hay un Gobierno neoliberal, destruye la actividad, empobrece a la población y, en ese mecanismo, empuja a una parte de los trabajadores a la informalidad”.

“Los Gobiernos populares nunca llegan a revertir totalmente esto. Hay un margen de la informalidad que queda instalado como un tema estructural. Siempre intentamos acompañar con más derechos. Hemos intentado acompañarlo desde el punto de vista de derechos, pero siempre queda esa franja”, lamentó Olmos en declaraciones a la AM 750.

Luego, pese a que indicó que tuvo una “excelente” relación de trabajo con Alberto Fernández y todo su gabinete, reconoció que “la mayor subestimación nuestra fue la baja de la inflación y lo que implica la estabilidad para los sectores populares. Siempre apuntamos a la maximización de la actividad económica”.

“Acá el tema central es el diseño de un proyecto de desarrollo nacional inclusivo que logre un consenso más de carácter mayoritario. Tenemos que formalizar, explicitar ese proyecto de desarrollo nacional y convocar a una unidad nacional”, acotó.

Todo esto como contrapartida de un gobierno que “no por casualidad ataca” al sistema educativo y tecnológico, pues “se trata de formar parte de un mundo donde pretenden que los argentinos quedemos incluidos en la mano de obra barata deslocalizable”.