

El diputado nacional con mandato cumplido por el PRO y exfutbolista, Carlos Javier Mac Allister, disparó munición gruesa contra el presidente de Boca Juniors, Juan Román Riquelme, adversario de su jefe político, Mauricio Macri, en la política del club de la Ribera.
“Creo que Boca ha vendido todas las joyas y se ha quedado con jugadores grandes. Me parece que, de todos los libros de pases que hizo Riquelme, éste es el mejorcito. Pero los libros de pases anteriores fueron muy malos. Me parece que Riquelme fue sin duda el mejor jugador de la historia de Boca, pero en la historia que conozco, de 1992 para acá, ha resultado ser el peor presidente”, juzgó.
En este sentido, alegó: “Como jugador, Riquelme ganó todo, fue decisivo, tuvo un papel preponderante. Pero como presidente, si vinieron 40 jugadores, en los primeros 30 le erró. Y es muy fuerte para cinco o seis personas (en referencia al Consejo de Fútbol) que han jugado tanto al fútbol”.
“Se vendieron los mejores jugadores, de 20 o 21 años que le podían dar un montón a la institución, que se fueron con 10 o 15 partidos en primera, y nos quedamos con jugadores grandes. Eso fue muy malo para el club. Ahora, este libro de pases ha sido el mejorcito”, puntualizó el exsecretario de Deporte de la gestión Cambiemos.
Asimismo, puso de relieve en declaraciones a Radio Rivadavia que “los presidentes que entienden de dirigencia no suben a los micros. Las cosas se hablan antes o después”.
“Los dirigentes toman decisiones cuando se abren y se cierran los libros de pases, es en esos momentos. Una cosa es cuando sos futbolista, y otra cosa es ser dirigente. Me tocó ser secretario de Deporte de la Nación, con 400 personas a cargo, y yo sabía que debía tener determinadas formas, determinados manejos, tomar decisiones, saber comunicar”, puntualizó el dirigente macrista.
De todos modos, aclaró que “estar preparado no significa ir a la universidad. Hay que saber rodearse de gente que sepa en su sector. No hay que ser necio, hay que ser abierto, responsable, saber escuchar. A veces uno llega a un determinado lugar y no sabe absolutamente todo, pero sí escucha a los que están hace 20 o 30 años, se rodea de los mejores y eso es fundamental para pensar en una institución grande”.
“La realidad de Boca hoy es que se ha quedado en el tiempo, con lo cual retrocede, porque el mundo avanza a mucha velocidad, y nosotros estamos en el mismo lugar hace ocho años. En ese lapso River hizo un estadio a nuevo, un predio, ganó títulos internacionales. Es la realidad. Tenemos que cambiar. Queremos otra vez ser el mejor club del mundo en el ranking FIFA, como lo hemos sido”, sentenció.