

Una polémica resolución de la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS) despertó un enérgico rechazo, tras visibilizarse la utilización de términos profundamente discriminatorios.
“Débil mental”, “idiota” e “imbécil” fueron algunas de las desafortunadas expresiones citadas en la Resolución 187/2025 publicada durante enero en el Boletín Oficial para referirse a personas con discapacidad.
La comunicación oficial comprendía a una normativa para la evaluación médica de invalidez en el acceso a las pensiones no contributivas por invalidez laboral.
Sin embargo, el espíritu de la medida quedó en un segundo plano por el impacto que ocasionó la vehemencia de los términos utilizados.
Ante el repudio generalizado, la Agencia Nacional de Discapacidad emitió un comunicado en el que se informó un “error”.
A modo de aclaración, el organismo esgrimió que “la publicación de los términos no tuvo intención discriminatoria, sino que se trató de un error derivado del uso de conceptos pertenecientes a una terminología obsoleta”.