

El exprocurador del Tesoro y exjuez de la Corte Suprema, Rodolfo Barra, se refirió a su salida del Gobierno y aludió también a la situación del Máximo Tribunal de Justicia, luego del rechazo del Senado a los pliegos de Manuel García-Mansilla y Ariel Lijo.
“La función publica es provisoria. El Presidente va cambiando de acuerdo a las circunstancias y necesidades. No es una sorpresa que termine la función y es propio del sistema”, analizó en declaraciones a CNN Radio.
Luego indicó que su salida de la gestión libertaria “fue un buenos términos. Me hubiera gustado continuar. Es un cargo importante y después de la Corte Suprema es lo que más puede entusiasmar a un jurista. Tuve la suerte de estar y estoy muy contento”.
En lo que hace a la Corte, sostuvo que “hay que esperar que esto se resuelva rápido. Puede funcionar con tres miembros, pero en la medida en que estén de acuerdo, sino no puede haber sentencia. La mayoría es de tres miembros, y en este caso no se puede dar”.
“Si no se juntan los tres votos hay dos caminos: uno, no resolver, que no es para nada bueno; o llamar a un conjuez, que también es malo porque esas decisiones no tienen el peso institucional como si lo hubiera definido la Corte con sus miembros”, agregó.
En tanto, evaluó que “el número de cinco miembros es muy pequeño porque esta demora en tener que llenar vacantes se puede dar nuevamente. Llevaría la Corte a nueve miembros”.
“El Presidente puede recurrir” al mecanismo de designar a un juez por DNU, “Javier Milei envió los pliegos y fueron rechazados por el Senado y, si bien formalmente no significaba que el juez de la Corte tenía que renunciar, se le había quitado mucho respaldo”, matizó.
Finalmente, Barra dijo que lo que ocurrió en la Corte “no fue manejado con la cautela política por parte del Ejecutivo” y “hubo mucho riesgo en el Gobierno”.